Empresarios del sur de Tenerife señalan ocho puntos de actuación para impulsar el desarrollo de la isla

La Confederación de Empresarios del Sur de Tenerife (CEST) ha elaborado un informe en el que recoge ocho medidas que consideran importantes para lograr el desarrollo de la isla y, especialmente, de su zona sur. El documento, según la organización, “es el resultado de meses de trabajo” y “numerosas reuniones con la permanente búsqueda del necesario consenso” que “precisa” la sociedad tinerfeña.

CEST también ha agradecido a los ayuntamientos del sur de la isla (Adeje, Arico, Arona, Fasnia, Granadilla de Abona, Guía de Isora, San Miguel de Abona, Santiago del Teide y Vilaflor) su colaboración en la elaboración del documento y el haber trasladado “las particularidades de cada municipio”.

La organización destaca el importante crecimiento de población que ha experimentado esa parte de la isla, que ya es casi “una nueva metrópolis”, pero señala que las administraciones “se han beneficiado de los ingresos que ha generado el músculo económico” de la comarca, “pero no ha correspondido en la inversión de las infraestructuras que precisa un crecimiento tan enérgico”.

Según las cifras aportadas por CEST citando datos de ISTAC, entre 2000-2019 Adeje tuvo un crecimiento relativo de su población del 241%, San Miguel de Abona del 185%, Granadilla de Abona del 147% y Arona del 111%. Sin embargo, recuerda la organización empresarial, hay grandes carencias en materia educativa, sanitaria y altos niveles de pobreza. Esto, lamenta, es una “terrible contradicción”: la “realidad de la pobreza frente a nuestra condición de potencia turística mundial”. Esta circunstancia “obliga a replantearnos cómo vamos a encarar nuestro futuro” e “iniciar una urgente actuación con un consenso inmediato de todas las fuerzas políticas y sociales”, explica.

Como resultado de ese consenso, según CEST, nacen las ocho propuestas de la organización, con el objetivo de “contribuir al progreso de Tenerife”. Se trata de puntos que la organización considera fundamentales y que deben ir acompañados de “agilidad administrativa” porque, en su opinión, la “tortuosa tramitación de los proyectos, el constante y repetitivo debate sobre la puesta en marcha de los mismos ha provocado el retraso de Tenerife y, como consecuencia, su empobrecimiento”.

Los ocho puntos son las infraestructuras, la economía azul, la formación, la mejora del entorno, los residuos y la economía circular, la normativa y la fiscalidad, la seguridad, y el ocio.

En el primer apartado, el de las infraestructuras, CEST afirma que, pese al crecimiento de la comarca sur, estas se han quedado obsoletas y están colapsadas. Entre las necesarias, la organización cita un enlace entre la TF-1 y Guaza que alivie el tráfico, instalaciones para deportistas que eligen la isla para entrenar, un carril bici entre Fasnia y El Médano, y modernizar el Aeropuerto de Tenerife Sur y construir una terminal corporativa y un hangar de reparaciones.

También, finalizar las obras del puerto de Granadilla, ampliar los usos pesqueros, deportivos y el atraque de cruceros en el puerto de Los Cristianos, ampliar la oferta náutica y abrir nuevos puertos y “evitar estar discutiendo un proyecto durante 25 años”, en referencia al puerto de Fonsalía, que pretende enclavarse en plena Zona de Especial Protección marina en la Franja Teno-Rasca, donde se ubica el único Santuario de Ballenas de toda la Unión Europea.

También llama CEST a solucionar los problemas de los vertidos y el tratamiento de las aguas. La organización aboga por implementar la desalación de aguas para surtir a las zonas costeras y liberar acuíferos para las medianías y sus habitantes, y propone la construcción de una planta desaladora en Fasnia.

La organización critica el constante debate respecto al tren o el tranvía, que resta “credibilidad” a las instituciones, y anima a implementar el transporte público mejorando el servicio de guaguas y el intercambiador de Los Cristianos.

También reclaman soterrar el trazado de alta tensión que discurre junto a la TF-1 y solucionar problemas como los que causaron el cero energético en la isla en 2020.

Por otro lado, estos empresarios también consideran un generador de negocios y puestos de trabajo el Circuito del Motor, por lo que animan a las administraciones a lograr el proyecto.

Por último, en el apartado de infraestructuras, CEST considera necesaria la construcción de un parque de bomberos que atienda a esa parte de la isla.

Más playas y recuperar el plan para los charcos

En cuanto a la economía azul, CEST demanda “la mejora de las zonas de baño y de los paseos marítimos para el uso y disfrute de clientes y residentes”, así como la construcción de embarcaderos en Masca y Teno; la adecuación de zonas de fondeo con boyas permanentes; y la ejecución de las playas en proyecto como San Blas en San Miguel de Abona, Los Tarajales, Las Salinas, y autorizar los proyectos de mejora en el Camisón en Arona, playa de Fañabé y el Veril/Duque Norte.

También pide la identificación y uso de los yacimientos de arena marina para la recarga y regeneración de las playas existentes; construir una escollera en Las Eras; ampliar la bahía de Los Roques, con la demolición de las piscinas y hacer una playa nueva; recuperar el plan de charcos de marea del Gobierno de Canarias (que fue paralizado ante la gran contestación social que cosechó), y actualizar la normativa respecto al avistamiento de cetáceos y la ZEC en la franja Teno-Rasca.

En cuanto a la formación, CEST pide finalizar las infraestructuras en ejecución como el Centro Integrado de Formación Profesional de Adeje o el IES de Parque de la Reina; un centro de formación para el sector náutico y el turismo activo; ampliar la oferta educativa en el sur, un nuevo centro escolar en Abades y un instituto en Arona.

Respecto al punto 4, la organización regenerar la reserva natural de Montaña Roja, revisar los límites del paraje natural del Malpaís de Rasca, así como terminar y poner en funcionamiento dentro de la Red de Senderos Insulares el del Camino Real del Sur y ofrecer otra alternativa turística.

Respecto al borrador del Plan de Uso y Gestión del Parque Nacional del Teide, actualmente en exposición pública, CEST considera que debe contar con el consenso de todos los operadores, especialmente con los del sector turístico.

En el quinto punto, los residuos, CEST considera “urgente continuar evolucionando el modelo de gestión de residuos en la isla y enfocarlo hacia la economía circular. Tenerife no puede permitirse continuar enterrando cerca de 600.000 toneladas de residuos cada año”.

Cambios en materia de fiscalidad

En cuanto a este punto, la organización de empresarios pide una regulación “exhaustiva y pormenorizada” del alquiler vacacional, una revisión del Decreto de seguridad en playas; y una simplificación normativa para que sea “impulso definitivo de la comunicación previa para generalizarlo como título habilitante para la construcción de viviendas y reformas en edificios turísticos, en vez de las licencias.

También propone la apertura de una oficina de devolución de IGIC en el Aeropuerto Tenerife Sur, el establecimiento de criterios claros y objetivos, para la declaración de Municipios Turísticos y Municipios de Interés Turístico, y, por último, la revisión del decreto de Restauración del Gobierno de Canarias, para excluir el IGIC de los precios de los productos y servicios de la carta de precios.

Respecto a la seguridad, CEST propone cinco medidas:

Por último, el octavo punto, relativo al ocio, CEST considera que debe actualizarse la legislación y normativa relativa a este sector, y “dada su importancia”, propone la creación de una Dirección General de Ocio y Hostelería, especializada en tratar los problemas y necesidades del mismo.