Aunque les pueda sonar extravagante, sigue vivo El Corte Inglés en su polémica ubicación en Meloneras, allí donde se decretó tras la primera moción de censura de esta centuria, que colocó al PP en la alcaldía de San Bartolomé de Tirajana. La segunda moción, la del otro día, se presentó, entre otros argumentos, trasladando esa licencia a San Fernando. Pero, estén atentos, que ya se anuncian visitas municipales a Carlos Muñoz, segundo de a bordo de Isidoro Álvarez, con este asunto en la cartera. Dicen en Maspalomas que el único que se opone es José Juan Santana, y que en los frenéticos contactos para que todo regrese al espíritu de la moción de los 80 kilos, hasta Román Rodríguez ha dicho desde Argentina que a él no le incomoda que planten El Corte Inglés en Meloneras.