Ya han empezado a grabarse los programas piloto de la producción más cara de La Nuestra y ya han aflorado los primeros problemas. La directora de antena del ente ha echado para atrás unos cuantos vídeos de pre producción por considerar que no reunen los mínimos exigibles para un programa que pretende convertirse en el referente de la cadena. Estos primeros resultados han encendido algunas alarmas en el ente público por el terror que les produce haber cedido como han cedido ante Can Can ante la expectación de toda la industria audiovisual canaria, que ve cómo se diluyen todos los encargos del ente ante el tamaño del presupuesto que se come Sin Secretos y el recorte presupuestario experimentado como consecuencia de la crisis económica. Habrá gran despliegue promocional, lo que les lleva a calcular que el primer programa tendrá récord de audiencia. Pero se preguntan qué ocurrirá con el segundo.