Es muy difícil acusar al programa 59 Segundos de Canarias de estar teledirigido, de contar solamente con periodistas adscritos a una u otra línea editorial. Peytaví tuvo que detener su acusación porque sabía que iba a ser contradicho de manera automática a poco se identificaran los periodistas que le acompañaban: los directores de Canarias7, La Provincia, Diario de Avisos, CANARIAS AHORA y Cope Tenerife. Es imposible concentrar en tan pocos metros cuadrados una amalgama más variada de líneas editoriales, de posicionamientos contrarios en asuntos como la corrupción, las medidas de ZP para la crisis o las desconsideraciones hacia Gran Canaria por parte de un sector de la prensa y la política tinerfeñas. No pueden decir lo mismo en el programa remedo que ha puesto en circulación la autonómica, donde el peso lo llevan periodistas del régimen, adictos a las subvenciones del régimen o encantados con que el régimen los tenga en lista de espera.