Lejos han quedado para Jaime Bouzón, concejal de Turismo de San Bartolomé de Tirajana, aquellos tiempos en que se apoyaba tanto en el sector del juego para desarrollar su tarea como presidente de Fecao. Ahora, en el otro lado de la barrera, ya ha salido a la palestra para apoyar la segunda licencia de casino en su municipio. Y lo ha hecho con escaso estilo, descalificando la calidad que, a su juicio, presenta el casino instalado en el Meliá Tamarindos, de San Agustín. Esas críticas tienen su aquél, porque si tan mal le va al Tamarindos, que ha perdido los últimos tres años el 12% de visitantes y el 14% de ingresos, ¿es tan necesario un segundo casino en el Sur? ¿Reactivará el sector turístico una nueva instalación de este tipo? Esperamos las sesudas conclusiones del concejal de Turismo, que no se coordina mucho con su alcalde, que digamos.