Canarias se olvida de su “tope turístico” de 2024: de nuevo habrá más visitantes extranjeros
Lo dijo y lo repitió varias veces la consejera de Turismo y Empleo del Gobierno de Canarias, Jéssica de León, tras confirmarse de forma oficial en enero pasado, lo que suele tocar a la vez que la feria Fitur en Madrid, que las islas habían recibido en 2024 casi 18 millones de turistas totales.
Ante ese récord histórico en atención de visitantes, la suma de nacionales (sin contar el turismo interior) y de extranjeros (2,5 millones más 15,2, respectivamente, hasta 17,7), y con una respuesta social cada vez más viva en Canarias que pide soluciones urgentes en la calle y de forma masiva ante los efectos sociales y medioambientales negativos debido a tanto turismo y a veces descontrol, De León aseguró en varias intervenciones en medios de comunicación que “Canarias ha alcanzado su tope turístico” y que, por lo tanto, el archipiélago había llegado el año pasado al límite de su capacidad tras recibir casi 18 millones de personas.
Así lo llegó a explicitar la consejera de Turismo: “Durante todo [2024] se ha registrado una capacidad media del 82% en los establecimientos hoteleros y extrahoteleros, y eso significa estar prácticamente al 100% [de ocupación]. Canarias no va a crecer mucho más”, se publicó el 2 de febrero pasado en la web de La Voz de Fuerteventura.
Ahora, pasado el ecuador de este 2025 y según el análisis de los datos macroeconómicos oficiales que el sector turístico ha dejado en Canarias durante el primer semestre, el acumulado de enero a junio, la conclusión es que los gestores públicos del turismo en las islas se han olvidado de esa premisa o esto se les ha ido un poco de las manos. O quizá muy poco hayan podido hacer.
Pero vayamos al grano y veamos lo que dicen los registros publicados hasta ahora sobre la marcha de este sector económico dominante en las islas (37% del PIB canario en 2024, según el estudio Impactur Canarias, realizado por la patronal Exceltur). Primero, la proyección anual en la llegada de extranjeros avanza que se puede crecer en torno al 4% de media este año, aún con los tres meses iniciales de la temporada alta 2025-26 por llegar y con un verano que está siendo bueno.
Todo apunta a que las islas volverán a tener en 2025 más turismo internacional que en 2024, con lo que solo por esta vía se superará el “tope turístico” del año pasado y con ello habrá nuevo récord global en las islas: tres en tres años seguidos, 2023 (16,2 millones), 2024 (17,7) y 2025 (por encima de 17,7, se entiende). En 2017, el cuarto mejor registro histórico, hubo 16 millones de turistas, con la por ahora segunda mejor marca en llegada de extranjeros, en 14,3 millones (en 2023, 14,2; en 2024, 15,2).
Hasta finales de junio pasado, en los seis primeros meses de 2025, el incremento de extranjeros alcanza las 300.000 personas (hubo récord histórico de llegadas en 2024, por encima del dato anterior de 2017) y, si todo sigue al mismo ritmo o parecido, que eso por ahora se va confirmando, se llegará a sobrepasar la cifra de 2025 entre medio millón o 600.000 visitantes más.
Entonces, el “tope turístico” de 2024, de 15,2 millones de extranjeros (y 17,7 millones de turistas totales), se puede desbordar para crecer hasta niveles próximos a los 15,8. Y así el nuevo récord llegará pese a que el turismo nacional es probable que sufra una leve caída anual, que es lo que hasta ahora viene registrando, eso sí, antes de entrar en el verano (menos 2,1% para el acumulado enero-mayo de 2025).
Hay que señalar que la relación porcentual entre turismo extranjero y nacional en Canarias respecto al total recibido en 2024 es la siguiente: 86% para el primer segmento y 14% para el segundo. Todos son datos oficiales o cálculos realizados a través de las estadísticas servidas por el INE, Frontur, Egatur, Istac y Turismo de Islas Canarias (Promotur).
Aquella previsión de crecimiento en llegadas desde fuera de España, un turismo que sin duda es muy importante, el que más, y de gran impacto económico, no refleja el único comportamiento que rompe registros anteriores en lo que va de este año. En efecto, pues casi todos los parámetros relevantes hacen lo mismo. Vayamos por partes:
a) La llegada de visitantes internacionales, con 7,8 millones de personas atendidas hasta junio pasado, el 4% de subida respecto al mismo periodo de 2024 y el 18% del total español (el país ha recibido ya casi 44,5 millones de extranjeros, el 4,7% más), lo que significa acaparar solo menos turismo con ese origen que Cataluña, en primer lugar. Y esto sin aún atacar la primera parte de la nueva temporada alta, la de 2025-26. Ese 4% de aumento ya deja, solo hasta junio, casi 314.000 turistas extranjeros más que en enero-junio del ejercicio precedente. Y si se proyecta hasta diciembre de 2025, pues será el doble, por encima de 600.000. En la coyuntura actual, la marca de 2025, el llamado “tope turístico” que se recalcó desde la Consejería, seguro que saltará por los aires.
b) Subida tras subida en gasto turístico e ingreso hotelero. En el primer componente, que no equivale a la riqueza que deja el turismo en las islas, la cifra acumulada es de 11.865 millones de euros en Canarias, con el 5% más que en la misma etapa de control de 2024, cuando también se incrementó de forma interanual. Ese valor absoluto para las islas es el 20% del total español para esa misma variable, con 59.622 millones de euros y una mejora relativa del 7,5%. Son registros del INE y Egatur de junio pasado. En el segundo aspecto, hay que decir, atendiendo a los datos servidos por Turismo de Islas Canarias (Promotur), que los ingresos de los alojamientos tradicionales de enero a junio de 2025 crecieron el 7,9%, con más de 2.800 millones de euros totales (fuente: Istac), gracias al incremento del gasto por día del visitante y a una ocupación media del 80% para hoteles y en torno al 70% para apartamentos. La estancia media baja muy muy poquito.
c) La estancia media, prácticamente igual, y más capacidad aérea en verano. La variable duración de la visita se mantiene o bajo muy poco, con un promedio de estancia en el lugar elegido para las vacaciones de 8,4 días, lo que solo supone el menos 0,1% para el acumulado de enero a mayo, los registros más recientes que ofrece Promotur. En capacidad aérea, todo bien, con el 8,8% más de plazas aéreas esta temporada estival respecto a la precedente. Lo mismo, pero con aumento más limitado, ocurrió en la temporada alta 2024-25 en relación con la anterior, la de 2023-24. Queda por ver cuáles son las previsiones de la que llegará tras el cierre del verano, la 2025-26, datos aún no publicados.
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