Luchar contra la mutilación genital femenina a través del deporte es la meta de la Fundación Kirira -ONG con sede ubicada en Tomelloso (Ciudad Real)-, a partir de su iniciativa 'Cambio de juego'. Un proyecto que une deporte, igualdad y prevención para avanzar hacia la erradicación de esta práctica “nociva que consiste en la resección parcial o total de los genitales externos femeninos, así como otras lesiones de los órganos genitales femeninos por motivos no médicos”, detallan desde Kirira. Aseguran que “es reconocida internacionalmente como una violación de los derechos humanos, que atenta contra la salud, la seguridad y la dignidad de millones de niñas en el mundo”.
Desde la organización declaran que en sus viajes a diferentes emplazamientos de Kenia, han observado que “las niñas y los niños fabrican balones con bolsas, telas o cuerdas para poder jugar”. A partir de esta iniciativa quieren ofrecer “condiciones dignas” de juego y aprovechar el fútbol como herramienta educativa, de igualdad y de pertenencia a los Clubes Anti-MGF.
El juego, una manera de proteger
Fundación Kirira considera que jugar es “un derecho fundamental” pero también una herramienta educativa. “A través del deporte, niñas y niños refuerzan su autoestima, aprenden a cooperar y las niñas encuentran espacios de participación en actividades como el fútbol, que tradicionalmente están masculinizadas”, explican.
Que las niñas practiquen deporte, además de aportarles “beneficios físicos y emocionales” les anima a unirse a los Clubes Anti-MGF. Formar parte de estos clubes “implica estar escolarizada o escolarizado, por lo que se reducen riesgos como el matrimonio infantil o la mutilación genital femenina”, expresan desde Fundación Kirira.
“A partir de estos clubes que son espacios educativos y sensibilización comunicamos más sobre estas prácticas nocivas. A menudo las comunidades están rodeadas de muchos mitos, no todas tienen los mismos, pero algunas pueden opinar que una mujer no mutilada no es fértil, pues lo que hacemos es desmentir este tipo de información”, explica Eva Macías, técnica de comunicación y sensibilización de Kirira.
Esta fundación lleva 18 años trabajando en tres comunidades de Kenia: Tharaka, Tangulbei y Abakuria. Macías explica que en Tharaka cuando empezaron la actividad de la ONG “prácticamente ninguna niña había ido a la escuela secundaria y toda la población de mujeres estaba mutilada. Sin embargo, esto ahora es algo muy residual y poco frecuente. Con un mensaje de educación y sensibilización lo estamos cambiando”. No obstante, señala que “no es un cambio de la noche a la mañana, han pasado 18 años, es un cambio generacional, ya que se trata de una problemática basada en la tradición, tiene que ser la propia comunidad la que se implique”. A pesar de esto, en el resto del país se sigue cometiendo esta violencia contra las mujeres.
Cómo colaborar
Su campaña 'Cambio de juego' tiene como objetivo conseguir 200 balones de fútbol para los 100 clubes anti-MGF que existen, 100 equipaciones completas para niñas en situación vulnerable y 100 infladores para uso comunitario, dando cobertura a más de 4.000 niñas y niños. El objetivo económico al que quieren llegar es a 7.000 euros, tomando como ejemplo que con 8 euros se financiaría un inflador, 15 euros cubriría una equipación completa y con 21 euros un balón.
Existen diferentes formas de contribuir con una donación, ya sea mediante un Bizum solidario con el código 33556, a partir de transferencia bancaria al número de cuenta ES39 0075 0176 57 0600184253 o de manera online a partir de este enlace.
En definitiva, “el juego se convierte en una forma de protección y en un motor de igualdad dentro de las comunidades”, señalan desde la ONG.