Los médicos sí, los celadores y técnicos en cuidados auxiliares de enfermería, no. El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) tiene en marcha desde el 29 de septiembre un plan de actividad quirúrgica extraordinario destinado a reducir las listas de espera. Es decir, está realizando más operaciones en el área sanitaria de Toledo y en su Hospital Universitario. El problema: está pagando por ello retribuciones especiales a determinadas categorías profesionales y a otras no.
Así lo denuncia la Federación de Sanidad y Servicios Sociosanitarios de CCOO en Toledo, que ha manifestado su rechazo a esta gestión de personal. “Hay categorías que están recibiendo retribuciones extraordinarias por su trabajo adicional, situación que entendemos en aquellos casos en los que no hay personal en bolsa de una especialidad concreta para asumir la superior carga de trabajo”, señalan desde el sindicato.
Sin embargo, hay otras categorías “imprescindibles” para sacar adelante el trabajo que han sido “olvidadas” a la hora de ofrecerles esas mismas horas extra o “peonadas”, como el personal técnico en cuidados auxiliares de enfermería, el personal técnico de rayos o el personal celador.
La sección sindical de CCOO en el Hospital Universitario de Toledo considera por tanto que esta decisión “supone un trato discriminatorio y desigual, rompe la cohesión de los equipos y genera malestar entre profesionales que han de trabajar juntos de forma coordinada en la misma misión”.
Por todo ello exige que, de forma inmediata, se cuente con las categorías profesionales excluidas en el mismo sistema de retribución extraordinaria. De lo contrario, el sindicato se reserva el derecho a emprender acciones de protesta encaminadas a “conseguir un trato justo para todos y todas”.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) se ha unido a esta denuncia. Habla de la “división y malestar” que está generando ese plan de intervención quirúrgica extraordinaria. Según apunta, el proyecto se ha puesto en marcha debido a que las listas de espera superan los 100 días en especialidades como digestivo, angiología, maxilofacial, neurocirugía, oftalmología, traumatología o urología en el Complejo hospitalario de Toledo. Según apunta, la exclusión de celadores y técnicos de rayos supone un “agravio comparativo inaceptable que vulnera el principio de igualdad entre profesionales”.
“No puede haber equipos de primera y de segunda dentro del mismo quirófano. El compromiso y la responsabilidad son compartidos, por tanto, también debe serlo el reconocimiento económico. Sin ellos, ningún quirófano podría funcionar con eficacia”, explica Victoria Gutiérrez, responsable de CSIF Sanidad en Toledo.
Celadores y técnicos de rayos asumen jornadas extendidas, cambios de turno y disponibilidad constante para garantizar que las intervenciones se desarrollen sin incidencias y su exclusión “no solo es injusta, sino que mina la motivación y el sentido de equidad dentro del sistema sanitario”. Este sindicato exige también al SESCAM la corrección inmediata de esta situación y la inclusión de todos los profesionales implicados en la actividad quirúrgica dentro del sistema de retribuciones extraordinarias.
Sobre la cuestión se ha pronunciado también Helena Galán, de la Plataforma por la Sanidad Pública en Toledo. En su caso arremete directamente contra la administración por fomentar “las desigualdades y el trato discriminatorio”. En concreto califica las listas de espera como una “losa” para el Gobierno castellanomanchego y afirma que el nuevo plan para aumentar las operaciones es una “ocurrencia que llega tarde” y que fomenta la discriminación entre trabajadores.
Profesionales “de primera” y “de segunda”
Se refiere con ello a lo mismo que denuncian los sindicatos: el “pago del importe” de ese incremento de intervenciones quirúrgicas a unos trabajadores, “pero no a todos los que forman parte de estas actividades”. Se discrimina, afirma, entre profesionales de “primera” y de “segunda”, siendo estos últimos “igual de imprescindibles”.
“La falta de personal para las ausencias conlleva que los Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería tengan que trabajar gestionando dos quirófanos simultáneamente”, constata Galán.
Explica además que la decisión final fue contratar personal para la actividad quirúrgica extra dejando las ausencias sin cubrir, “aunque esto solo ocurre en el personal técnico y celador”. Por otra parte, las ausencias de enfermería se cubren y son pagadas como horas extra, sin embargo “en los técnicos y celadores estas ausencias las cubren los compañeros”.
De esta forma, argumenta que la medida adoptada por el Gobierno regional solo lleva a la reducción de lista de espera “de manera puntual” y al “aumento del sueldo de unos pocos” mientras se promueve “la discriminación entre profesionales y la desigualdad entre compañeros”.
El SESCAM lo circunscribe a Traumatología
Fuentes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha han precisado a elDiario.es Castilla-La Mancha que no se trata de “peonadas” sino de un plan de urgencias “diferidas” circunscritas a fracturas de Traumatología.
Estas intervenciones se llevan a cabo en el turno de tarde para evitar desprogramar pacientes en el turno de mañana de esta especialidad. “Nos referimos a fracturas de miembros superior o inferior”, afirman las mismas fuentes, quienes se limitan a concluir que este plan se ha organizado “en función de la disponibilidad de los recursos especializados necesarios”.