Un error en las adjudicaciones de profesores en Catalunya ha obligado a reiniciar el proceso y mantiene en vilo por ahora a 57.000 docentes, que son los que estaban este verano pendientes de plaza de cara al 1 de septiembre. El Departamento de Educación de la Generalitat ha reconocido el fallo, que atribuyen a un “factor humano”, y aseguran que trabajan para restablecer los nombramientos de cara a la semana que viene.
El fallo ha obligado a Educación a pedir disculpas públicamente, también a los sindicatos, y a solicitar una comparecencia en el Parlament para dar explicaciones. El director general de Profesorado y Centros Públicos, Josep Maria Garcia Balda, ha detallado que han abierto un expediente informativo para aclarar lo ocurrido.
Las listas definitivas con las adjudicaciones de cara al curso 2025/2026 se publicaron este jueves, pero a las pocas horas fueron retiradas tras detectarse los errores. Esto significa que cientos de docentes conocían ya el que iba a ser su destino, pero esto podría cambiar en los próximos días. Tras paralizar el proceso, Educación ha asegurado que confían en que su repetición no vaya a alterar a demasiados de esos nombramientos.
Garcia Balda ha explicado que el error afecta en realidad a entre 700 y 800 adjudicaciones. Son las que ocupan una serie de plazas que se mantuvieron como “perfiladas” cuando debían pasar a ser “ordinarias”. Pero subsanarlo, dicen, no es tan sencillo, porque su liberación para nuevas adjudicaciones crea un efecto cadena que puede alterar los nombramientos del resto de 57.000 docentes que concursaban.
Desde USTEC, el sindicato mayoritario de la enseñanza pública, han calificado lo sucedido de “irregularidad administrativa grave”. Han asegurado que esto supone un “maltrato” a los docentes afectados, algunos de los cuales dicen que ya estaban buscando domicilio para su nueva ubicación.
El escándalo ha provocado también la reacción de distintos partidos políticos. Junts ha reclamado este viernes a la consellera de Educación, Esther Niubó, que adopten “medidas drásticas” tras lo ocurrido, y ha denunciado que esto “demuestra de nuevo que el Departamento no está al lado y no cuida de su profesorado”, según las declaraciones de la diputada Anna Erra, que ha pedido llegar hasta el fondo de la cuestión.
En ERC han hablado de “despropósito muy grande” y aseguran compartir la “indignación” y el “nerviosismo” del profesorado. “Con la publicación definitiva, los centros habían empezado a elaborar horarios y hablar con el profesorado para comunicarles su labor del curso”, lamentan, convencidos de que esto afectará a la calidad de la docencia al inicio de curso, el 8 de septiembre.
“La paralización de las adjudicaciones es un escándalo de dimensiones descomunales y alguien debe responder por ello”, han reclamado desde el PP. La CUP, por su parte, ha pedido “depuración de responsabilidades” y “ceses”.