Encerrados en Elcogás
Los trabajadores de la planta térmica de Elcogás se mantienen encerrados en la central durante 24 horas, y pasarán allí toda la noche del día 4. Será la primera de las muchas noches que los empleados han planeado pasar en la central en el mes de diciembre, último de actividad si no se modifican los planes de los propietarios de la empresa de cerrarla.
Esta semana es un “plante” de 24 horas pero en las próximas semanas se irá aumentando: la semana que viene serán 48 horas consecutivas, desde el miércoles 10 al jueves 11; la siguiente semana serán 72 horas, del lunes 15 al miércoles 17. A partir del 22 de diciembre el encierro será indefinido: toda la Navidad la pasarán los trabajadores en la planta. Así lo harán hasta el 4 de enero, y el día 5 empezará una huelga general indefinida en la planta. Son las medidas máximas de presión que van a poner sobre la mesa los trabajadores de una central que a pesar de ser pionera en Europa en determinadas tecnologías energéticas, tiene planeado su cierre para dentro de un mes.
El cierre definitivo de la planta está puesto para el 31 de diciembre por parte de la empresa mayoritaria del complejo, Endesa.
El ahora comisario de Energía de la Unión Europea, Miguel Arias Cañete, ha asegurado que el cierre de Elcogás no es una competencia de Bruselas sino que es competencia del Gobierno de España, por lo que la Unión Europea se ha “lavado las manos” en el asunto, y es el Ministerio de Industria de quien depende que la actividad de la planta continúe. Mayte Fernández, alcaldesa de Puertollano, como el Gobierno regional han mostrado su disposición al Ministerio para que se llegue a una solución aunque sea temporal para que la planta siga activa, si bien la decisión pertenece a sus propietarios privados.
Las conversaciones entre Endesa, la italiana Enel y la francesa EDF, propietarias del complejo, con el Gobierno siguen sin fructificar en ningún acuerdo concreto, a pesar de que las partes muestren su disposición a un acuerdo. 1.500 empleos entre los directos e indirectos están en el aire con el cierre de la planta de Puertollano, una de las empresas industriales más importantes de Castilla-La Mancha.
