La importancia del impulso a los idiomas en las pequeñas localidades

Aprender idiomas en localidades de menos de cinco mil habitantes no es una tarea fácil, y es el nicho de mercado que encontró Get Brit!, empresa toledana especializada en la enseñanza de idiomas, que cuenta con unos veinte mil alumnos en más de 160 municipios de cinco comunidades autónomas. Víctor Vicente, su director, ha señalado que los mismos ayuntamientos se han dado cuenta de la necesidad que tienen los ciudadanos en la actualidad en relación con los idiomas.

Get Brit! inició su recorrido en 2008, con la apertura de su primer centro en el municipio Miguel Esteban, en Ciudad Real. En 2015, ya llegaban a las comunidades autónomas de Andalucía, Extremadura, Castilla y León, y Madrid con casi veinte mil alumnos, la mayoría de ellos en Castilla-La Mancha. Vicente ha señalado que en Castilla-La Mancha existen dos mercados diferentes repartidos entre los núcleos rurales y los núcleos urbanos, en los que “el fondo es el mismo pero la variable es el número de habitantes”.

Concretamente, la empresa se dio cuenta de que sólo se necesitaba un poco de ayuda institucional para poder llegar a los municipios más alejados de las grandes ciudades, y donde los consistorios no podía proporcionar una formación de idiomas. En este sentido, se creó el programa 'Idiomas para todos' en conjunto con la Fundación Caja Rural de Castilla-La Mancha. Este programa ha permitido llegar a municipios más rurales, que constituyen el 79,1 % de todos los centros y cuentan con el 48,5 % del total de alumnos.

Además, Vicente ha destacado que las escuelas municipales de idiomas ofertan actividades como campañas de comunicación, cuentacuentos o charlas culturales, que no se pueden encontrar en academias de idiomas normales. Estas escuelas se han ido formando gracias a convenios de colaboración con los Ayuntamientos, pero son gestionadas por la empresa, que se encarga de la publicidad, la comunicación, la captación de alumnos, la puesta en marcha y realización de los exámenes oficiales al final de curso y la contratación de profesores.

En cuanto a cómo se crea una empresa tan exitosa, Vicente ha asegurado que no es algo sencillo, y que, de hecho, en un momento se quedó con menos de 500 euros, pero que la clave es haber hecho bien los planes y no tener miedo de lanzarse a la aventura. Sin embargo, el director asegura que cada vez hay más formación y menos inconsciencia a la hora de montar un negocio. Vicente también ha criticado que las ayudas públicas que ha recibido su empresa en estos años “han sido nulas”, por lo que demanda “más asignaciones económicas, ayudas a los proyectos, al establecimiento o ayudas a las nuevas tecnologías”.