La exigencia del pueblo saharaui: “España debe cumplir con el respeto a los derechos humanos”
Historia política del Sáhara, derecho internacional, solidaridad, periodismo, cultura y religión fueron los temas que se tocaron en la jornada 'Sáhara, un estado a (re)conocer', organizada en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Castilla-La Mancha en Talavera de la Reina. Alumnos, alumnas y profesores organizaron el evento, después de una reciente visita a los distintos campamentos saharauis. La delegada del Frente Polisario en España, Jira Bulahi, fue una de las ponentes de la jornada, marcada por la solidaridad por el pueblo africano.
Bulahi señala que el principal objetivo era contextualizar el conflicto por el que pasan los saharauis, para visibilizar el proceso por el que pasa la república y como ha sido su consolidación, tanto de la república como de las instituciones, también dentro del contexto político africano. “Nuestro trabajo ha abarcado todo el proceso reivindicativo que los saharauis quieren que funcione como un reflejo, un ente que los represente”, explica la delegada del Frente Polisario. Esto, señala, tiene relación directa con las demandas actuales y futuras del pueblo.
“El proyecto común de todos los saharauis es volver a un Sáhara libre e independiente y poder realizar sus sueños como personas y como grupo social”, explica Jira. Por eso, afirma, se necesitan instituciones educativas, sanitarias y culturales que refuercen la autonomía y den respuesta a las necesidades de la ciudadanía. “Esto se conjuga con el apoyo del mundo solidario para poder hacer posible el funcionamiento a través del proyecto e intercambio, la solidaridad en su conjunto”, señala.
En este sentido, Jira Bulahi quiere recalcar que el pueblo saharaui ya tiene una dinámica establecida en el contexto de la política del continente africano, “y también en las aportaciones de la agenda africana, en los distintos aspectos que trabajamos de forma transversal”. “Esto también es la realización de todo individuo, en cualquier contexto social y la creación de todas las condiciones que permiten su desarrollo y su evolución, independiente de estar viviendo en unas condiciones difíciles”.
El “esfuerzo” que ha hecho el pueblo, señala, se ha visto “coronado” con las estadísticas de la propia UNESCO que, explica, los ha situado dentro de los que mayores contribuciones hacen al desarrollo de paz y en políticas “tanto de género como juventud”. Sin embargo, Bulahi también recuerda que, España tiene “responsabilidades históricas, jurídicas y morales” con el pueblo saharaui. “España debe cumplir con el respeto a los derechos humanos”, afirma Jira, que describe que el conflicto nace de una “descolonización malacabada” que acabó con un territorio que no se cedió ni a los saharauis, ni a las Naciones Unidas. “También es el país más cercano, con el que la ciudadanía saharaui se ha identificado muchísimo”, recalca.
La delegada del Frente Polisario recalca también que ha sido el mismo conflicto el que ha creado los lazos más fuertes entre ambas sociedades, gracias a los trabajos que se han hecho en el campo de la solidaridad. “Pero también con los principios que la propia España debe cumplir: respeto a los derechos humanos, velar por la consolidación de la paz y también apoyar la resolución de un conflicto que tiene ya más de 70 resoluciones que reafirman el derecho de autodeterminación para el pueblo saharaui.
El trabajo en los campamentos saharauis
Lucía García-Pliego, alumna de segundo curso de Trabajo Social, fue una de las encargadas de organizar las jornadas y también se encuentra entre quienes acudieron a visitar los campamentos. Junto a ella acudieron también Maarine Aguado, Tania Aragón, Mar Ayllón, Marina Díaz, Estrella González, María Mondaray, Soraya Moreno y Raquel Villodre, acompañadas por el profesor Fernando Rovetta. “Para mi ir al Sáhara era algo que me motivaba desde pequeña, por eso iniciamos el proceso con el profesor Rovetta para preparar este viaje.
Fueron nueve estudiantes los que emprendieron el viaje. “Vivirlo ahí en primera persona ha sido algo increíble. Hemos aprendido lo que de verdad es un pueblo, con valores que nosotros no conocemos”, señala García. En los campamentos llevaron a cabo dos proyectos de baile y deporte en el colegio de discapacitados, visitaron también el Congreso de la Mujer y compartieron con los jóvenes del Frente Polisario, así como con la Asociación de Familiares de Presos y Desaparecidos Saharauis, AFAPREDESA. “No hacía falta pedir nada, todo lo que tienen lo ofrecen con una sonrisa en la cara y las puertas siempre están abiertas. Todos se ayudan entre todos”, concluye.
