La Policía Nacional desarticula un grupo de la mafia albanesa que pretendía traficar con seres humanos en la costa de Alicante

Un acuerdo con agentes inmobiliarios de la zona de Alicante y Murcia para alquilar viviendas en la costa valenciana ha propiciado la desarticulación por parte de la Policía Nacional de una presunta organización criminal relacionada con la mafia albanesa.

La investigación, desarrollada por agentes especializados, detectó que una mujer perteneciente a la presunta organización mafiosa, se disponía a cerrar un acuerdo de alquiler en un conocido centro de negocios de Murcia, con el objetivo de asentarse en esa comunidad autónoma. La operación policial se ha saldado con la detención de cinco personas de origen albanés y moldavo y el registro de varias viviendas.

La supuesta organización criminal localizaba y alquilaba viviendas y chalets de grandes dimensiones mediante documentación falsa, como nóminas, contratos laborales o documentos de identidad, con el objetivo de instalar grandes plantaciones de marihuana en interior (conocidas como 'indoor') que producían hasta cuatro cosechas al año.

El grupo mafioso albanés distribuía el cannabis en el extranjero, con “ingentes beneficios”, para financiar el tráfico de seres humanos para su explotación sexual, su principal labor, según ha informado la Policía Nacional.

Los cinco detenidos, según las pesquisas, actuaban de forma “concertada y jerarquizada”, se repartían las funciones y contaban con diferentes niveles de especialización. Así, mantenían conductores, localizadores de viviendas en zonas aisladas, vigilantes, instaladores, además de hombres dedicados a tareas de seguridad a los que denominaban “los soldados”.

Los investigadores han registrado dos inmuebles situados en las localidades alicantinas de Busot y Orihuela. En una de las viviendas hallaron una plantación de marihuana, además de material para su conservación y mantenimiento. En el otro inmueble se estaría preparando la instalación de una segunda plantación. Los cinco detenidos han pasado a disposición judicial en Murcia y Alicante. Dos de los principales responsables del presunto entramado criminal han ingresado en prisión.