El espectáculo pirotécnico Nit de l'Albà (Elche) acaba con 46 heridos leves

El espectáculo pirotécnico de la Nit de l'Albà celebrado anoche en honor a la patrona de la ciudad, la Virgen de la Asunción, se ha saldado con 46 personas atendidas, 13 de ellas en los centros hospitalarios de Elche, aunque todos de carácter leve.

Estos datos han sido ofrecidos hoy por el concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Elche, José Pérez, en una rueda de prensa en la que ha intervenido también el alcalde de la ciudad Carlos González, el concejal de Sanidad Carlos Sánchez, el director gerente del Hospital General y el director médico del Hospital del Vinalopó.

Todos los heridos fueron tratados en el momento y dados de alta, aunque algunos de ellos serán atendidos en días posteriores de manera ambulatoria. Asimismo, y por segundo año consecutivo, ninguno ha requerido del traslado a la Unidad de Quemados del Hospital General de Alicante.

El espectáculo pirotécnico de la Nit de l'Albà llena de luz y color el cielo de Elche en la noche del 13 de agosto con más de 64.000 cohetes y cerca de 400 palmeras, y que tiene como colofón el lanzamiento de la Palmera de la Virgen desde la torre del campanario de la Basílica de Santa María, en honor a la Virgen de la Asunción.

El primer atendido fue a las 20:53 horas en el Hospital General y el último a las 05:00 de la madrugada en el Hospital del Vinalopó. Entre los heridos figuran tres niños de cuatro años.

Las razones de las lesiones han sido 17 por carretillas (los llamados cohetes borrachos), 12 por caída de cañas y 17 por motivos relacionados con el uso de material pirotécnico.

El concejal de Seguridad Ciudadana ha indicado que el número de heridos se ha reducido un año más, ya que se ha pasado de los 54 de 2015 a los 46 de 2016.

El alcalde ha señalado que este año la Nit de l'Albà ha sido una de las mejores de la última década en cuanto a incidencias y accidentes y por el hecho de no haber ningún herido grave. Y es que hace diez años, en 2006, el número de heridos ascendió a 165, una cifra que ha ido bajando desde entonces.

No obstante, ha apuntado que “no estaremos satisfechos hasta que no haya ningún herido”.