Una mujer migrante y su bebé mueren intentando cruzar el Río Bravo para llegar a EEUU

Una mujer y su bebé han muerto ahogados cuando intentaban cruzar el río Bravo desde México hacia Estados Unidos, según informaron este martes autoridades consulares hondureñas que esperan confirmar la nacionalidad de las víctimas.

“Fuimos notificados por la autoridad fronteriza del Sector Del Río de que estas personas traían documentación hondureña”, ha explicado a Efe la cónsul de Honduras en la localidad fronteriza de McAllen (Texas), Ana Bulnes.

La mujer y su hijo de un año y nueve meses de edad intentaron atravesar el río caminando, según la información recibida por las autoridades hondureñas. En una declaración enviada a Efe, un portavoz de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) ha indicado que el hecho ocurrió el miércoles 11 de septiembre en horas de la mañana.

La funcionaria hondureña afirma que “en este momento se está siguiendo el proceso de identificación debido de ambos cuerpos para realmente verificar su nacionalidad”, lo cual está a cargo del médico forense. Bulnes, quien se abstuvo de confirmar las identidades de los fallecidos,asegura que las autoridades hondureñas disponen un fondo de repatriación para estos casos.

“Una vez que recibimos del médico forense la confirmación de identidad, entonces procedemos con el trámite de la repatriación de los cuerpos”, agrega la cónsul, quien indica que el proceso de identificación lo están haciendo vía huellas dactilares. La diplomática consideró que este hecho “es más que triste” y admitió que no sabe “qué palabra utilizar”.

El portavoz de la CBP ha dicho que el pasado 11 de septiembre “agentes de la Patrulla Fronteriza asignados a la estación de Del Río recibieron información sobre un posible ahogamiento en río Grande (río Bravo)”.

Según el portavoz, se activó una “búsqueda intensiva” realizada en helicóptero por un equipo de operaciones aéreas y marinas de la CBP en un área próxima al riachuelo San Felipe.

Agentes de Marina de la Patrulla Fronteriza que se desplazaban en bote lograron rescatar los cuerpos y notificaron a las autoridades locales, quienes tomaron custodia de estos, agrega la información.

En junio pasado, un padre salvadoreño y su pequeña hija también fallecieron cuando intentaban cruzar el río Bravo. La imagen de los cuerpos sin vida de Óscar Alberto Ramírez y su hija Valeria, de 23 meses, se convirtió en un símbolo más de la tragedia en las fronteras y de la situación de los migrantes en la frontera entre EEUU y México. Su muerte, denunciaron organizaciones como Amnistía Internacional, reflejaba las “fallidas políticas” de los presidentes de EEUU y México para parar el flujo migratorio.

En los últimos meses, México ha endurecido su política migratoria. A inicios de junio, llegó a un acuerdo con EEUU que evitó que la administración Trump impusiera aranceles a todos los productos provenientes del segundo. A raíz de ello, México envió a las fronteras norte y sur a la Guardia Nacional -un nuevo cuerpo de seguridad impulsado por el Ejecutivo- y se contrató a más personal migratorio. También desplegó las redadas en el interior de su territorio contra las caravanas de migrantes. 

Paralelamente, las autoridades de EEUU ya están aplicando la normativa del Gobierno para denegar el asilo a las personas en situación irregular en la frontera sur que hayan pasado por México u otros países sin haber pedido allí esta protección, tras el respaldo a esta medida que dio la pasada semana el Tribunal Supremo.