Comienzan en Atenas las obras del mayor proyecto urbanístico del Mediterráneo

El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, asistió este viernes al comienzo de las obras para la construcción de un gran complejo urbanístico en las antiguas instalaciones del aeropuerto de Atenas, calificado como el mayor proyecto de construcción del Mediterráneo.

Casi veinte años después del cierre del aeródromo, catorce desde que el recinto acogiera algunas disciplinas de los Juegos Olímpicos y nueve después de su licitación, las excavadoras empezaron hoy las obras preliminares de un proyecto que ha estado plagado de obstáculos burocráticos y políticos y todavía debe superar una serie de trabas.

De completarse este ambicioso proyecto, el antiguo aeropuerto, situado frente al mar y entre algunos de los barrios residenciales más selectos de la capital, se transformará en 620 hectáreas de hoteles, centros comerciales, instalaciones deportivas, un casino, un puerto deportivo, unas 5.000 viviendas de lujo y un enorme parque del tamaño del Hyde Park en Londres.

“Es alentador que, en medio de las dificultades económicas, el proyecto de inversión más emblemático del país comienza a hacerse realidad”, dijo Mitsotakis mientras las excavadoras demolían los primeros cinco edificios.

Mitsotakis describió el plan, como el “posiblemente proyecto más grande en el Mediterráneo”, que, añadió, generará alrededor de 80.000 empleos en su fase de pleno desarrollo.

La promotora griega Lamda Development, que está llevando a cabo la inversión, cuenta con que el coste total ascenderá a unos 8.000 millones de euros.

Se espera que la primera fase dure entre 3,5 y 5 años, durante los que se demolerán cerca de un millar de edificios y serán construidos el complejo de ocio, hoteles y el centro comercial.

Le seguirán la renovación del frente costero, con la creación de dos puertos deportivos, la construcción de casas y del 30 % del parque, que ambiciona convertirse en la mayor zona verde de la capital.

Sin embargo, todavía hay una serie de obstáculos que superar, tanto financieros como jurídicos.

Uno de los mayores escollos por resolver es el litigio en torno a la construcción del gran complejo de ocio, considerado el núcleo de la inversión, con un total de 1.000 millones de euros.

La multinacional Hard Rock International, que era una de las dos compañías admitidas a concurso, ha presentado recurso contra la adjudicación del proyecto a un consorcio formado por la estadounidense Mohegan Gaming & Entertainment y la helena GEK Terna.

Este proyecto tiene como objetivo la construcción y gestión de un complejo de ocio y turismo que contará con un casino de unas 1,2 hectáreas con 120 mesas de juego y unas 1.200 máquinas tragaperras, así como un hotel de lujo, un centro de conferencias, restaurantes e instalaciones deportivas.