Instrucciones para conservar la honorabilidad de un banquero
El indulto a Alfredo Sáenz, consejero delegado del Grupo Santander, es una de esas ocasiones en las que PSOE y PP parecen haberse puesto de acuerdo sin mucho esfuerzo. Gracias a eso y al empeño del Banco de España, el número dos del grupo ha ido saltando obstáculos en su proceso judicial. La meta está en mantener la honorabilidad y en que no haya manchas en su expediente. Joan Coscubiela y Laia Ortiz, diputados de ICV, anuncian una querella contra el exgobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez por no haberlo apartado de su cargo.
1. Condenado por el Tribunal Supremo
Ocho meses de prisión, multa de 9.000 euros e inhabilitación son el castigo impuesto por el Supremo el 24 de febrero de 2011. El tribunal dictamina que Sáenz acusó en falso a unos acreedores de Banesto por estafa y alzamiento de bienes. Un recurso deja después la pena en tres meses y una sanción económica de 400 euros, pero la inhabilitación sigue firme.
2. Zapatero: “Se entiende que el indulto es razonable. Y punto”
El Consejo de Ministros, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero, firma el indulto cuando está ya en funciones. La condena e inhabilitación son sustituidas por una multa. Zapatero niega que el trato a Sáenz tenga algo que ver con sus buenas relaciones con Emilio Botín e invita a los españoles a que entiendan el asunto “como crean conveniente”.
El Gobierno se asegura de eliminar el borrón de su currículum. El indulto incluye que a partir de entonces quedan “sin efectos cualesquiera otras consecuencias jurídicas o efectos derivados de la sentencia, incluido cualquier impedimento para ejercer la actividad bancaria”.
3. El Banco de España no se da por enterado
El exgobernador del Banco de España se niega a ordenar al Santander que aparte a Sáenz. Y cuando es indultado, decide esperar hasta que el Supremo resuelva el recurso. Para MAFO, la honorabilidad de Sáenz sigue fuera de toda duda antes y después del indulto.
4. “Es lo que hay”, dice el Tribunal Supremo
La querella por prevaricación contra Zapatero y su ministro de Justicia, Francisco Caamaño, es archivada. El auto del alto tribunal afirma que el perdón no es irrelevante y que la ley de indultos no da opción “porque renuncia a exigir el más mínimo ejercicio de justificación”. Las palabras con las que el magistrado zanja el asunto son “es lo que hay”.
La Sala de lo Penal del Supremo no considera que el indulto suponga convertir en honorable a Sáenz porque no borra los antecedentes, pero se queda en una opinión ya que las conclusiones no pueden ser aplicadas. La competente en este caso es la Sala de lo Contencioso Administrativo, que tramita otro recurso.
5. Querella contra MAFO
Los dos diputados de ICV llevan tiempo peleando para que el asunto no quede así. En sus reclamaciones al Banco de España insisten en que la entidad debe respetar la normativa y forzar la salida de Sáenz del Santander porque éste “sigue teniendo antecedentes por un delito doloso”. Sin respuesta satisfactoria, ambos han decidido presentar una querella criminal contra Fernández Ordóñez. En los fundamentos se defiende que Sáenz está inhabilitado para seguir ejerciendo su cargo porque la condena por delito doloso acabó con su honorabilidad y supuso tener antecedentes penales.
6. El Banco de España decide si no hay dudas sobre “la conducta personal y profesional”
El decreto del Ministerio de Economía que regulará las condiciones para que los banqueros ejerzan sus funciones aún está en fase de consultas pero puede favorecer a Sáenz. El Ministerio defiende que no ha hecho más que trasladar la normativa que le pedía la Autoridad Bancaria Europea y que en realidad supone un endurecimiento de los requisitos. Y desde el sector alertan del peligro que puede suponer el abusar de iniciativas judiciales con el fin de acabar con una carrera profesional.
El caso es que, si se mantiene el decreto, los antecedentes penales por delito doloso no serán un impedimento para la honorabilidad y la decisión recaerá en el Banco de España. Como era hasta ahora, pero con una cobertura legal.
La entidad deberá tener en cuenta a partir de ahora si el banquero en cuestión ha mostrado “una conducta personal y profesional que no arroje dudas sobre su capacidad para desempeñar una diligente y prudente gestión”. También entrarán otros factores como el tiempo transcurrido desde la condena, si el delito fue cometido en provecho propio o si su conducta posterior ha sido intachable. Mientras tanto, uno de los cuatro recursos presentados contra el indulto sigue en el Supremo. Si Economía da luz verde al decreto y el recurso al indulto prospera, Sáenz respirará tranquilo.
