El Tribunal Penal Federal de Suiza ha condenado al exinformático del HSBC, Hervé Falciani, a cinco años de prisión por espionaje económico. El responsable del escándalo Swissleaks, donde se filtraron datos fiscales de clientes de la rama suiza del banco HSBC, no asistió al juicio y fue absuelto de los otros cargos que se le imputaban, entre ellos el de violación de secreto comercial.
La pena finalmente impuesta ha sido inferior a la que había pedido la fiscalía. La Fiscalía había solicitado seis años de prisión para el excolaborador del banco británico, quien en 2008 transmitió información bancaria a las autoridades de Francia, que luego la compartieron con otros países con el fin de perseguir a sospechosos de evasión fiscal.
En el momento de presentar la causa, el representante del Ministerio Público de la Confederación Helvética, Carlo Bulletti, había enumerado las diversas fases de la actividad delictiva que se le atribuía a Falciani y apuntó que los primeros pasos del extrabajador del banco HSBC en 2006, cuando supuestamente adquirió y preparó la documentación que después intentaría vender. El fiscal también mencionó en aquel momento que en 2007 Falciani intentó comerciar con los datos de la entidad, para lo que contactó con entidades de Arabia Saudí y el Líbano, además de con los servicios secretos de varios países.
La lista de nombres
Los nombres de la lista se dieron a conocer en 2015, siete años después de que el exinformático enviara un correo a las autoridades de varios países. En una operación coordinada por Le Monde y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) en la que participan 60 medios de todo el mundo –en España, El Confidencial y La Sexta–, se incluyeron los nombres de 106.000 personas físicas y jurídicas residentes en 203 países. Sus cuentas en la filial suiza sumaban entre 2006 y 2007, años a los que pertenece la filtración, más de 100.000 millones de dólares, 78.000 millones de euros.
El fallecido Emilio Botín era el español que más fondos tenía en el banco suizo en esos dos años. La familia del banquero, el único apellido ilustre español cuya presencia en la lista de Falciani se conocía hasta ahora, contaba, según El Confidencial, con unos 2.000 millones de euros ocultos en la filial suiza del HSBC. Para intentar esconder quién estaba detrás de sus cuentas, emplearon un complicado entramado de sociedades opacas en Panamá y las Islas Vírgenes oculto mediante testaferros.