Los sindicatos CCOO y UGT piden subir el salario mínimo a 1.273 euros al mes y que tribute por primera vez

Laura Olías

25 de noviembre de 2025 12:19 h

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Los sindicatos CCOO y UGT han anunciado este martes su propuesta de subida del salario mínimo interprofesional (SMI) para 2026: un 7,5%, hasta situarlo en los 1.273 euros brutos al mes. Supone 89 euros más al mes respecto a los 1.184 euros al mes vigentes este año y con el supuesto de que el salario mínimo tribute al IRPF por primera vez, por lo que abogan ambas organizaciones de trabajadores. Además, exigen algunos cambios en el decreto que regula el salario mínimo, como que se impida que las empresas absorban la subida a través de ciertos pluses.

Así lo han explicado este martes el secretario de Acción Sindical y Transiciones Estratégicas de CCOO, Javier Pacheco, y el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján, en una rueda de prensa. Ante las preguntas sobre la elevada cuantía, Luján ha subrayado que los márgenes empresariales han aumentado más el último año, “un 8,2%”, según los datos de la Agencia Tributaria, por lo que considera que la propuesta sindical es “contundente”, pero “moderada”.

Además, Pacheco ha precisado que el incremento no es comparable al de años pasados, porque incorpora por primera vez la tributación en el IRPF, que supone la mayor parte de la subida planteada. Sin ella, el alza del SMI sería del 2,7%, hasta los 1.216 euros al mes, ha explicado el responsable de CCOO.

Los sindicatos mayoritarios han comunicado su propuesta antes de que la Comisión de expertos y expertas del Ministerio de Trabajo –de la que forman parte– haya terminado su recomendación de subida del SMI para que cumpla con el 60% del salario medio neto del país. Este año, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, pidió a los especialistas dos propuestas de incremento: una en la que el SMI siguiera sin tributar en 2026 y otra subida teniendo en cuenta que el salario mínimo pagara IRPF por primera vez, como ha planteado Hacienda en los últimos años.  

Que el salario mínimo pague IRPF por primera vez

Los dos sindicatos defienden este año de manera novedosa que el salario mínimo pague impuestos por primera vez. Eso sí, garantizando siempre que el neto que llega al bolsillo de los trabajadores cumpla con el 60% del salario medio neto del país, como marca la Carta Social Europea. Ante este mismo debate el año pasado, CCOO sí se abría a la tributación del SMI (si se mantenía el neto del 60% del salario medio), pero UGT se posicionó en contra del pago de impuestos.

Ahora, CCOO y UGT han cerrado su apuesta por la tributación del salario mínimo en 2026, un paso para “homologar” la contribución fiscal del salario mínimo al conjunto de los trabajadores del país, ha justificado Javier Pacheco, que ha advertido de que una vez que el SMI alcanza unos estándares de dignidad y suficiencia (como esa meta del 60%) no hay justificación para mantener esa exención fiscal. Incluso, puede ser “discriminatoria” con otros trabajadores que ganan un poco más que el mínimo y que sí tributan en el IRPF, ha indicado el representante de CCOO.

Fernando Luján ha argumentado que el año pasado UGT consideró que el SMI no estaba garantizando ese 60% del salario medio. “Andamos tan justos que cualquier menoscabo o quita hacía introducirse en la pobreza”, ha apuntado el vicesecretario general de UGT, pero una vez que se garantice esa meta, el sindicato ha considerado que había que acabar con la “anomalía” de que el SMI no tributara, ha añadido.

Condición de que la subida no se absorba en los pluses

Además, los sindicatos mayoritarios incluyen varias condiciones adicionales al Gobierno para la subida del SMI este 2026. Como ya reclamaron el año pasado, las centrales de trabajadores exigen que el Ejecutivo modifique el real decreto que regula el salario mínimo en varias cuestiones, entre las que destaca que las empresas no puedan absorber la subida a través de ciertos pluses, como los de peligrosidad, nocturnidad o reparto de beneficios.

Este real decreto se está negociando en el marco de la transposición de la Directiva Europea sobre salarios mínimos, que la justicia europea acaba de respaldar en lo esencial. CCOO y UGT han vinculado un posible acuerdo con el Gobierno en la subida del SMI de 2026 a estas modificaciones legales. Es decir, que “aunque se coincida en los dígitos” de subida, los sindicatos no van a firmarla si no va acompañada de estos cambios legales, ha asegurado Javier Pacheco.

Luján ha sostenido que, “si el Gobierno tiene algún crédito”, debe acometer estos cambios en la regulación del salario mínimo, que ya se comprometió a los sindicatos el año pasado y, en su opinión, va en la línea de lo marcado por la justicia europea. Por su parte, si se aprueban estas modificaciones en la absorción de pluses, las patronales de empresarios se prevé que recurran la normativa en los tribunales.

En los sindicatos sitúan esta materia como una prioridad, incluso que justificaría retrasar la subida del salario mínimo, ya que estos cambios legales requieren de un real decreto que tiene que pasar por el Consejo de Estado (un proceso que puede llevar algunos meses). “Por correr no vamos a acordar una subida absorbible”, ha sostenido el representante de CCOO. “Si hay que esperar, se espera. Es más importante una subida real”, ha rematado.