La entrada de CaixaForum Barcelona lucirá un jardín vertical de grandes dimensiones a partir del mes de diciembre, en conmemoración al vigésimo aniversario del centro cultural de la Fundación “la Caixa”.
El proyecto, que cuenta con la colaboración de Fira de Barcelona y el consistorio de la capital catalana, incluye la instalación de una fachada vegetal de más de 500 metros cuadrados constituida por 22.000 plantas de 40 especies vegetales y su característica más significativa será que lucirá 15 árboles de grandes dimensiones suspendidos en altura. La estructura se ubicará en la antigua pared del Palau de la Metal·lúrgia del recinto de Montjuic de la feria y tendrá una altura de 12 metros y 50 metros de ancho.
El esqueleto de la obra estará construido con acero galvanizado, mientras que la parte visible exhibirá plantas autóctonas o adaptadas al clima mediterráneo. La selección, que no responde únicamente a criterios ornamentales, incluirá especies con “un alto valor melífero para que sirva de sustento a diferentes poblaciones de abejas, mariposas y otros polinizadores”, según apuntan sus promotores.
Al mismo tiempo, para que la belleza del conjunto permanezca activa durante gran parte del año, se han incluido especies que brotan en diferentes épocas del año, aunque la mayor parte de ellas se concentrarán en los meses fríos, con el objetivo de que las aves encuentren alimento. Además, entre las razones tenidas en consideración se encuentra la variedad estética y funcional, ya que estas especies vegetales también servirán de refugio para pequeños animales que ayudarán a controlar las posibles plagas.
La principal característica del conjunto serán sus árboles de grandes dimensiones, algo insólito en este tipo de obras vivas verticales. El arbolado se instalará en jardineras especiales mediante el empleo de técnicas de fijación radicular, junto a las necesarias mallas estructurales que actuarán como apoyo y guía de crecimiento para los géneros trepadores.
El riego se realizará mayoritariamente con aguas pluviales, procedentes de más de una docena de depósitos que servirán para humedecer el jardín entre una semana y 15 días, en función de la estación del año. El agua sobrante se recogerá en la parte inferior del sistema y será reutilizada.
Entre las especies vegetales que se dispondrán en forma de mosaico se encuentran la salvia, la lavanda o la hiedra, además de enredaderas aromáticas como el jazmín o la madreselva y árboles tan dispares como el olivo, el sauce o el chopo. Será tal la variedad, que la propia instalación servirá como proyecto divulgativo, ya que el público podrá escanear códigos con el teléfono móvil para conocer elementos de la historia vegetal y humana, además de gráficos, vídeos y diferente información sobre las paredes de cultivo.
Las raíces como elemento sugestivo
La iniciativa de la Fundación “la Caixa” se plantea como un nexo entre la ciudad, trama urbana y la parte forestal de la montaña de Montjuïc. Este bosque vertical es el primero que se instala en España, pero la institución ya tiene precedentes de jardines verticales en el CosmoCaixa —también en Barcelona— o el CaixaForum de Madrid.
Este último, inaugurado en 2007, fue el primero de sus características en España y está considerado como el de mayor superficie continua del mundo. Su diseño es obra del botánico francés Patrick Blanc, quien es un referente en la materia e inventor de su propio sistema de muros verdes, que también lidera la puesta en marcha del bosque vertical en Barcelona.
Para comprender mejor la complejidad del proyecto,se debe tener en cuenta que uno de los objetivos es recordar el paso de las estaciones y los cambios inevitables para conseguir la adaptación al medio.
Además, el proyecto también incorpora una parte escultórica, ya que las raíces de los árboles se reproducirán como esculturas porque las reales no se podrán ver. De ese modo, se fomenta la faceta educativa del proyecto, ya que a través de códigos QR, se podrá conocer la relación histórica del hombre con el mundo vegetal.