El legado de circularidad que nos pueden enseñar los más mayores

Azahara García

La escena es una de esas que saca una sonrisa y que bien podría reflejar la mejor instantánea para celebrar el pasado 26 de julio, el día de los abuelos. Se trata de un parque en el municipio madrileño de Tres Cantos, en el que un grupo de usuarios del centro de mayores cercano, ataviados con chalecos verdes, guantes, pinzas y mucha voluntad, recorren la zona recogiendo residuos. Van acompañados de otros voluntarios, terapeutas, familiares y son conscientes de que con su comportamiento, no solo están ayudando a que esa zona verde esté limpia, sino también están dando un ejemplo a cualquiera que les vea.

“A mí la verdad es que me apeteció mucho porque era una manera de, al tiempo que yo iba, concienciar a la gente que nos veía hacerlo. Creo que les dimos un ejemplo”, explica Encarni, una de las personas mayores que el pasado 6 de junio participó en esta actividad de Libera Senior, una iniciativa de Ecoembes. No fue la única y es que más de 400 mayores en distintos puntos de la geografía española se unieron a otros voluntarios, contribuyendo a la limpieza de sus entornos naturales, a través de la coordinación de diferentes equipos, y favoreciendo de esta manera tanto la socialización como la vida activa de los usuarios de estas residencias.

Además, no solo es que se recogieran los residuos sino que aquellas personas que participaban. también podían caracterizar estos desechos a través de la aplicación de Basuraleza, para contribuir así al estudio de los residuos que se encuentran de manera más frecuente en la naturaleza. Por ejemplo, en este parque de Tres Cantos (Madrid) se encontraron muchos microplásticos, especialmente residuos de trozos de globos de agua. Sin embargo, en otros entornos como bosques, ríos o playas, las bolsas de plástico, las toallitas o las colillas son los más habituales, poniendo en riesgo la supervivencia de ciertas especies y la conservación de los entornos protegidos.

“El potencial de los mayores es muy importante porque son un 20% de la población aproximadamente en nuestro país”, explica Beatriz Aylagas, coordinadora de ESG en Ecoembes, que incide además en que los mayores son verdaderos expertos en la circularidad, aunque muchas veces no lo perciban así. Por eso, desde Ecoembes pusieron en marcha el programa Terceros en Edad, Primeros en Reciclar que busca integrar a los mayores en el camino hacia una economía circular, reforzando la idea de que la circularidad solo se puede lograr involucrando a todos los sectores de la sociedad. Esta iniciativa ha logrado impactar en casi 800.000 usuarios mayores, de los cuales casi 34.000 han recibido formación de sensibilización y sobre todo de acción, enfocada a los gustos y las necesidades de los mayores.

Mayores como agentes del cambio

“Tenemos actividades que conectan con un envejecimiento activo, con socialización, con salidas fuera, contacto con la naturaleza, voluntariado, actividades con materiales reciclados, incluso también que lo que se plantea es un poco romper el nicho de centro de mayores para también hacer cosas con niños, con nietos, con hijos de empleados, con escolares de colegios cercanos, con familiares o con el conjunto de la sociedad. Porque entendemos que es súper importante que los mayores sigan siendo agentes activos en la sociedad”, resalta Aylagas. Actualmente, este programa ha involucrado a más de 2.200 centros, en lo que se incluyen también residencias (tanto públicas como privadas) y centros de día. A estos centros se le han facilitado más de 5.000 cubos y papeleras de color amarillo y azul, para que los usuarios puedan aportar en el reciclaje de los envases así como del cartón y el papel.

“Cada granito de arena cuenta y contamos todos desde los niños hasta las personas más mayores”, señala Encarni que no puede evitar emocionarse al hablar de cómo sentía que ayudaba a la gente y que tenía un impacto positivo al “concienciar sobre dar una vida mejor al planeta, que lo estamos destrozando”, explica mientras insiste en que los mayores pueden ser muy útiles. “Ellos también se sienten empoderados, ya de partida tienen un sentido común y un estilo de vida bastante circular, aunque no lo llamen así. Las ‘Rs’ las aplican perfectamente porque así lo han hecho toda la vida y no conciben ahora otra forma de hacer”, aclara Aylagas.