Colectivos extremeños culpan al gobierno del PP del aumento de la brecha salarial entre hombre y mujer
En los últimos años, las cifras del paro han aumentado de forma notoria en Extremadura. El papel de la mujer en el mercado laboral se ha reducido y esto ha influido también en las que sí trabajan.
Las mujeres con contrato temporal pierden hasta 2.130 euros, convirtiéndose en las grandes perjudicadas por la devaluación salarial.
Cuando en 2008 proliferaron los mayores brotes oscuros de la crisis económica, la evolución del papel de la mujer en el ámbito laboral ha sufrido importantes retrocesos.
El estancamiento se produce tanto en términos de tasa de paro como de empleo, ya que “siguen siendo la peores paradas a la hora de incrementar dichos niveles y con serias dificultades en su incorporación al mercado de trabajo”, comunican desde el sindicato UGT.
Las mujeres tienen el hándicap de caracterizarse por una mayor parcialidad en sus jornadas laborales, por lo que los ingresos se ven reducidos.
Los hombres, con mejores registros salariales
En el extremo opuesto se encuentra la situación de los varones que, en ese mismo período, sus salarios han ascendido de manera uniforme en ese intervalo, registrando un incremento de hasta el 12,33%. Para el sindicato, los efectos de la reforma laboral demuestran que han sido especialmente “nocivos” con las mujeres y su ganancia salarial, que ha “incidido en un aumento de la desigualdad de género”.
Por su parte, Marisa Tena, miembro de la asociación feminista Malvaluna, ha valorado las cifras como “escandalosas” y las entiende como “consecuencia directa de los recortes” y repercute “negativamente” en la igualdad entre hombres y mujeres.
Además, critica que en Extremadura se pusieron en marcha unos proyectos en colaboración con empresas y otras instituciones y que ya “no existen”.
Según Tena, “hasta 2009 programamos planes con el gobierno extremeño para erradicar esas diferencias salariales, pero esas medidas han desaparecido” por lo que la relación de estos datos con las políticas ejercidas es “directa”.
Problema estructural, no económico
El análisis de Teodora Castro, secretaria de la mujer en Extremadura de CCOO, los números son un problema “estructural” de cómo está situada la mujer trabajadora en el mundo laboral y aclara que no es consecuencia de “la crisis”.
Propone una voluntad “expresa” por parte del gobierno regional y central para frenar esta tendencia. “Sin voluntad política es impensable que mejore el contexto”, expresa Castro.
