Los terrenos del antiguo astillero de La Naval de Sestao están a un paso menos de iniciar una nueva vida. Aunque el camino está siendo mucho más largo de lo esperado. Después de tres años de trámites administrativos y de cuatro desde que la empresa VGP comprara los terrenos del antiguo astillero en un proceso concursal por 36 millones de euros, el ayuntamiento de la localidad ha aprobado el Plan Especial de Ordenación Urbana de los antiguos terrenos de La Naval, con lo que se prevé que las obras de acondicionamiento de la zona y de construcción el nuevo polígono, arranquen a principios del año que viene. Casi con dos años de retraso sobre las previsiones que tenía la empresa belga en un principio.
De momento, se han acometido las obras de derribo del antiguo astillero, salvo dos edificios que el Gobierno vasco ha declarado protegidos por su valor histórico y patrimonial y cuya rehabilitación será por donde arranquen las obras.
El trámite de la aprobación del plan por el Ayuntamiento de Sestao permitirá arrancar con la construcción de un parque logístico, que es a lo que se dedica la empresa VGP, en el que se ubicarán después diferentes actividades en las que al menos un 51% tendrá que tener carácter industrial, y que de momento son una incógnita, aunque las negociaciones que se han mantenido estos últimos años han ido siempre encaminadas a que se trate de actividades relacionadas con el sector naval o auxiliar.
El alcalde de Sestao, Gorka Álvarez, ha considerado que trata de un “día histórico no solo para el futuro de Sestao sino también para el futuro de la comarca de Ezkerraldea y del Territorio Histórico de Bizkaia, ya que este proyecto es tan importante y de una envergadura tan grande que traspasa las fronteras del ámbito local”. Y es que se trata de una parcela de casi 300.000 metros cuadrados de superficie que se destinarán en su mayoría a usos empresariales.
En una primera fase está previsto rehabilitar los edificios que han sido protegidos por el Gobierno vasco. Más adelante, en una segunda y tercera fase, se acometerán los trabajos de urbanización y construcción de los nuevos edificios. Para ello, VGP ha presentado ya en el área de Urbanismo los proyectos de reparcelación y urbanización con el objetivo de que el Ayuntamiento proceda a su aprobación.
El Plan prevé actuaciones como el desdoblamiento de la calle La Naval, de tal forma que en el futuro tendrá dos carriles por sentido, así como la creación de una plaza de uso público de 13.300 metros cuadrados. Además, se rehabilitarán 30.000 metros cuadrados de edificios históricos protegidos y se destinarán hasta 98.000 metros cuadrados para la construcción de nuevas naves industriales.
La empresa belga VGP inició en 2022 el desmantelamiento físico del antiguo astillero para acondicionar las instalaciones a los nuevos usos. El desmantelamiento de los edificios y las obras de acondicionamiento han estado condicionadas por el hecho de que el Gobierno vasco declaró parte de La Naval como Bien Cultural de Protección Especial, con la categoría de Conjunto Monumental, lo que supone que VGP no podrá tocar dos diques secos, cuatro grúas y una nave del denominado “entorno este” de astillero; mientras que del “entorno oeste” deben mantenerse dos edificios de oficinas, una nave de producción y una pasarela aérea, que conecta La Naval con el municipio de Sestao por encima de la línea de cercanías del ferrocarril.
VGP siempre ha hecho hincapié en que el nuevo Parque La Naval, tendrá un “enfoque principalmente industrial”, algo a lo que le obliga la normativa municipal de Sestao, que señala que un 51% del terreno debe tener este uso, y que podría ir más allá de esa obligación, y que “dicho porcentaje fuera ser significativamente mayor”. En este sentido, la zona de los diques (entorno protegido en el este de La Naval) pueden mantenerse la actividad naval (bien de nuevas construcciones, reparaciones o reciclaje de buques), que dio origen a estas instalaciones.