Abrimos una nueva ventana a la información de Extremadura. Nos asomamos a la actividad en torno a un sector como el agrario que representa en torno al 6% del PIB regional.
Cooperativismo, innovación, producción ganadera, agroindustria, turismo rural, seguros agrarios... Toda la información del sector en esta nueva sección que coordinará Juan Carlos Antequera, un profesional de la economía del campo con experiencia en diversos ámbitos.
Aseguran que se están sacrificando animales sin las garantías suficientes. El motivo, que se está utilizando una prueba para la tuberculosis bovina denominada 'gamma-interferon' que en el 80 por ciento de los casos “no es fiable”. De manera que “se sacrifica el animal y una vez muerto se comprueba que no era real la prueba”.
Decenas de ganaderos, acompañados de cencerros, se han concentrado a las puertas de la Presidencia de la Junta en Mérida para reclamar un cambio en los protocolos contra la tuberculosis bovina.
Explica Florentina Mirón , de la Unión de Extremadura, que no son pocos los casos en los que una vez sacrificado el animal se comprueba que la enfermedad no era real la prueba, y por lo tanto no estaba infectado.
Reclaman igualmente que se indemnice a precios de mercado, “porque en estos momentos están dando unos precios ridículos y es la ruina para los ganaderos”. Mirón ha dicho que, mientras tanto, “están ciervos y jabalíes campando a sus anchas” e infectando a las vacas, por lo que piden que la Junta de Extremadura habilite medidas para el descarte de esa fauna salvaje.
Las cifras
A la protesta han asistido ganaderos de la Unión de Extremadura y la Asociación de Ganaderos de La Vera, que ponen de manifiesto que según los datos de la Junta, en el año 2014 se sacrificaron 3.948 animales de 431 explotaciones, unas cifras que se han duplicado en el año 2015, y hay alrededor de 10.000 animales sacrificados y 1.000 rebaños afectados.
Dado que en ese momento ni el presidente de la Junta, Fernández Vara, ni la consejera de Agricultura, Begoña García, se encontraban en Mérida, ha sido la portavoz del gabinete, Isabel Gil Rosiña, la que ha recibido a una representación de los ganaderos para realizar una mediación y recoger sus reclamaciones a fin de trasladarlas a la titular de Agricultura.
Un problema, el de la tuberculosis bovina, en el que “la Junta lleva tiempo trabajando”, afirman fuentes de la misma.
Trasladan los ganaderos que hay muchas zonas afectadas actualmente en las comarcas de La Vera o los municipios de Valencia de Alcántara, Montehermoso, Moraleja, Trujilla o Zorita, y que esto hace que la comunidad autónoma sea actualmente la más afectada por esta enfermedad.
Florentina Mirón ha indicado que las pérdidas totales por la incidencia de este mal en la región no se han calculado y ha especificado que éstas no tienen sólo que ver con los animales sacrificados sino con la inmovilización de éstos, que se determina en cuando aparece un solo positivo en al explotación. En ese sentido, ha especificado que por cada animal sacrificado o inmovilizado se pueden perder 800 ó 900 euros.
La responsable de La Unión ha explicado que, a pesar de las medidas contra la enfermedad decretadas en los últimos años, la situación no ha mejorado y sigue habiendo “repuntes”, con afectación incluso del ganado caprino, lo que pone de manifiesto que las acciones llevadas a cabo hasta ahora no son las adecuadas.
Las organizaciones agrarias dicen que a principios de abril solicitaron una reunión urgente al presidente para estudiar las medidas a desarrollar para controlar la enfermedad y así evitar las pérdidas económicas que les está ocasionando a los ganaderos extremeños.
La respuesta del presidente a estas asociaciones fue, según señalan, que ya estaba creada una mesa para estudiar las medidas, donde se encuentran los sectores afectados que están impulsando medidas consensuadas para atajar este problema.
Entienden el acto de este miércoles como “el pistoletazo de salida” para generalizar las protestas de los ganaderos extremeños por toda la región hasta que se tomen medidas encaminadas a controlar la enfermedad sin arruinar a los ganaderos.
Aseguran que se están sacrificando animales sin las garantías suficientes. El motivo, que se está utilizando una prueba para la tuberculosis bovina denominada 'gamma-interferon' que en el 80 por ciento de los casos “no es fiable”. De manera que “se sacrifica el animal y una vez muerto se comprueba que no era real la prueba”.
Decenas de ganaderos, acompañados de cencerros, se han concentrado a las puertas de la Presidencia de la Junta en Mérida para reclamar un cambio en los protocolos contra la tuberculosis bovina.