La obra del nuevo Hospital de Don Benito-Villanueva de la Serena les costará este año un millón más al Servicio Extremeño de Salud (SES) por el encarecimiento de los materiales, tras el acuerdo alcanzado con la empresa constructora para la revisión de los precios, según ha explicado el director gerente del SES, Ceciliano Franco.
La ejecución de la obra es “razonable”, a su juicio, teniendo en cuenta el parón provocado por la covid-19 en la Administración, la huelga de transporte, la falta de mano de obra y el encarecimiento de los materiales. Y aunque ha reconocido que habrá que “forzar la máquina” los próximos 15 meses para que esté en tiempo en forma, ha asegurado que estará para finales de 2023 “sin duda”, y adjudicada la fase siguiente.
Franco ha asegurado la obra “no se ha parado” por la voluntad de la empresa y de la Junta, y ha dicho que gracias a la disposición adicional 15 de los presupuestos regionales de 2022 se ha podido hacer un reajuste de precios al alza que ha satisfecho a ambas partes.
El responsable del SES ha comentado, que además de la necesidad de hacer un modificado para incluir una rotonda interior, el encarecimiento de costes ha llevado a que se tenga que cambiar el material de la fachada por otro.
También ha reconocido que hay un retraso en la facturación y ha estimado que 2022 acabará con una certificación de nueve millones, lejos de los 30 millones de la cantidad total de la obra.
Franco ha aclarado que en los presupuestos extremeños para 2023 hay consignados 25,6 millones para la primera fase, pero que hay otras muchas partidas para equipamiento e instalaciones que harán que el dinero para el hospital supere los 40 millones el próximo ejercicio.
El diputado de Ciudanos José María Casares ha comentado que son cinco las legislaturas las que se lleva hablando del nuevo hospital, que hace mucha falta y que demandan profesionales y usuarios, pero año y medio después de los primeros movimientos de tierra “solo vemos grúas”.
Casares, que ha reconocido problemas como la falta de mano de obra o el encarecimiento de los materiales, hay recalcado que acumula mucho retraso y que hay que echar el resto y “correr” para cumplir los plazos.