La Xunta ha anunciado que va a convocar, con mensajes que se están enviando ya estos días, a las personas fumadoras de entre 55 y 74 años para que se sometan a pruebas para detectar el cáncer de pulmón. Es un programa piloto de cribado que se va a implantar en todas las áreas sanitarias gallegas después de que se probase en un centro de salud, el de O Ventorrillo, de A Coruña.
El anuncio lo hizo este lunes el presidente gallego, Alfonso Rueda, que explicó que en esa primera experiencia, que se puso en marcha en 2024, se citó a las personas de esa franja de edad que eran fumadoras o exfumadoras con una carga tabáquica elevada. De las casi 400 personas que cumplían los criterios, 273 aceptaron hacerse un TAC de baja dosis. El 7,4% de los casos resultaron ser sospechosos y la indicación fue que se derivasen a la vía rápida del cáncer de pulmón. Hubo cinco casos de cáncer confirmados.
Ahora, el programa piloto -denominado LUNG-GAL- se extiende a las siete áreas sanitarias, antes de evaluar si se incorpora a la cartera de servicios del Servizo Galego de Saúde (Sergas). Estos días, unas 48.660 personas de entre 55 y 74 años recibirán un mensaje de invitación para participar en una encuesta para saber si son fumadoras o lo fueron y llevan menos de 10 años de abstinencia. También se concretará si tienen una exposición al tabaco igual o superior a 20 paquetes al año. Con el cuestionario, el Sergas identificará a los candidatos a participar en el proyecto, a los que se les hará un TAC en el primer semestre de 2026. Calcula que serán unas 14.598 las que respondan y que la cifra permitirá tener una muestra representativa de zonas urbanas y rurales, de costa y de interior.
La partida reservada para el proyecto piloto es de 60.405 euros y la idea es evaluar si es eficaz implantar un cribado de cáncer de pulmón mediante TAC de baja dosis en el sistema sanitario público de Galicia. La Xunta recuerda que la detección del cáncer en un estadio temprano mejora la tasa de supervivencia.