Los plantones del PP irritan a Vox y ponen en peligro las negociaciones del Govern balear

Continúa la incertidumbre sobre el futuro gobierno de Balears. En los últimos días, PP y Vox mantienen un tira y afloja en sus negociaciones sobre un posible pacto, a lo que se suma ahora la polémica suscitada después de que Marga Prohens -la candidata del PP a la presidencia- decidiera no acudir a la reunión que ambas formaciones tenían prevista este miércoles, delegando su intervención en un equipo negociador. El plantón de Prohens llevó a los ultraderechistas a cancelar finalmente el encuentro.

Los ánimos del partido de extrema derecha se encontrarían tan caldeados que la formación estaría dispuesta a votar en contra de la investidura de Prohens si no entrase a formar parte del futuro equipo de gobierno, según publica el diario Ara Balears. Mientras tanto, el presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, habría ordenado directamente a sus representantes en las islas a que hagan valer sus votos y asuman cargos de gestión en el futuro Ejecutivo, tal como ha informado la Radiotelevisión pública IB3.

Desde la formación, sin embargo, no confirman estos extremos. En declaraciones a elDiario.es, fuentes de Vox en Balears apuntan que se encuentran a la espera de ser nuevamente convocados por el PP para reunirse y negociar las condiciones para facilitar la investidura de Prohens. Por el momento, indican, estos días no hay ningún encuentro programado. “Esperamos que se convoque en breve y reconducir la situación”, aseveran.

Las mismas fuentes insisten, además, en apelar al modelo político de Castilla y León, donde gobiernan PP y Vox, partido éste último que, además, ostenta la vicepresidencia de la Comunidad. “Nuestra petición es clara: entrar en el gobierno”, subrayan. E inciden: “Tenemos ocho diputados. No es un piquito que uno necesite para gobernar. Cuando nos convoquen lo plantearemos, pero de momento hoy no hay nada convocado”. Asimismo, ven improbable que antes del lunes, cuando los diputados electos recojan sus credenciales en la Junta Electoral, se produzca alguna novedad en este sentido.

En esta misma línea, desde el PP señalan a elDiario.es que no se ha producido ninguna novedad y que, de haberla, “sería la semana que viene”. “Por nuestra parte las cosas están como estaban el miércoles”, abundan. Por su parte, Prohens ha reiterado en numerosas ocasiones que la única opción que contempla es gobernar en solitario y formar un Govern desde la estabilidad, no solo para la sesión de investidura sino para el conjunto de la legislatura.

Ronda de contactos

Cabe destacar que esta semana se ha producido la primera ronda de contactos entre Prohens y el resto de formaciones políticas con representación en el Parlament que se constituirá el 20 de junio. La sesión de investidura se espera entre el 27 y el 30 del mismo mes, en la que la candidata 'popular' espera convertirse en la próxima presidenta del Govern. En las primeras reuniones que han tenido lugar esta semana, sólo Vox ha mostrado su predisposición a facilitar un gobierno del PP. La cuestión central que se discute es a cambio de qué, es decir, si la extrema derecha ocupará posiciones importantes en la configuración de las principales instituciones del archipiélago balear.

Una de las posibilidades que se barajan es que Vox reclame la presidencia del Parlament. Jorge Campos, líder del partido de extrema derecha en Balears, aseguró este lunes en su cuenta de Twitter que su modelo es el de Castilla y León, donde Alfonso Fernández Mañueco (PP) gobierna en coalición con Juan García-Gallardo (Vox), repartiéndose ambos partidos las consejerías. El acuerdo al que se llegó para que Mañueco formara gobierno implicó que la presidencia del parlamento autonómico quedara bajo el control de la ultraderecha, una fórmula que ahora Campos podría reclamar en el archipiélago balear. Públicamente, lo que ha dicho el líder de Vox es que su partido no está hablando con el PP sobre “reparto de cargos”.

Pese a que Prohens en todo momento afirma que la única opción que contempla es gobernar en solitario, el planteamiento de Vox es ambiguo. En ocasiones deslizan que pueden estar a favor de negociar una abstención, y en otras lanzan mensajes como que su modelo es el de Castilla y León, donde controlan varias consejerías.

En caso de querer entrar en el Govern, es posible que Vox reclame la Conselleria de Educación, con el objetivo de confrontar el modelo de inmersión lingüística y reducir notablemente el uso del catalán en las aulas. Cabe recordar que cuando el gobierno conservador de José Ramón Bauzà (PP) planteó este escenario en la legislatura anterior al primer gobierno progresista de Armengol, con su apuesta por el trilingüismo, se encontró con una fuerte oposición en las calles.

Pacto en Alcúdia

Uno de los lugares en los que ya se ha escenificado su pacto PP y Vox es el municipio mallorquín de Alcúdia, donde ambos partidos, junto a la formación Unió, gobernarán en el Ayuntamiento con Fina Linares (PP) al frente de la alcaldía. La suma de los tres partidos arroja un total de doce concejales, uno más que la mayoría absoluta.

Linares gestionará las áreas de Contratación, Personal, Urbanismo y Comunicación. Por su parte, en virtud del acuerdo, Vox gestionará Policía, Turismo y Patrimonio. La futura alcaldesa ha agradecido a las dos formaciones que hayan “dado el paso” para facilitar la gobernabilidad municipal y hayan priorizado “los alcudiencs por encima de cualquier interés partidista” para conseguir un gobierno “estable y en beneficio de Alcúdia”.