Los centros de transfusión de sangre han amanecido con largas colas de italianos a sus puertas que esperan su turno para donar, después de que las autoridades locales y otras organizaciones como Cruz Roja instaran a la población civil a aumentar las reservas.
Solo en el hospital Umberto I de Roma más de 200 personas se han congregado al amanecer para donar sangre, un gesto que han agradecido varios de los municipios afectados de la región de Lazio.
Se animó a donantes de toda Italia a “planificar su donación comunicándose con el servicio de transfusión local” para evitar la escasez de existencias, ha recogido la agencia de noticias Ansa.