Cosa de 'meigas'

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La exposición 'Brujería: Insólitos objetos y fantásticas criaturas' muestra más de 300 objetos que representan la tradición de la brujería en la Europa meridional y central entre el siglo XVI y comienzos del XX. Así podrá visitarse a partir de este viernes 11 de enero en el Centro Cultural Caja Rioja-La Merced. El evento cerrará sus puertas al público el próximo 23 de febrero.

El origen de la exposición es la colección de un comerciante italiano que vivió a principios del siglo pasado y de cuyo diario se eligieron seis personajes -las Brujas Castigliana, Eleonor y Gena; el vendedor ambulante; y el mago Andreu-, que dividen la exposición en otros tantos apartados, en los que se abordan las artes de las brujas, su cultura y su mundo desde una visión más etnológica que esotérica, con el objetivo de que el visitante varíe esa denostada visión que existe sobre las hechiceras y curanderas.

Entre las piezas destacan las momias, reliquias, hadas, instrumentos de tortura y actas de procesos del santo oficio, pomadas mágicas y recetas de bebedizos portentosos, pactos diabólicos y fósiles, además de otros objetos de menor valor, que los hechiceros utilizaban para impresionar a quienes solicitaban sus servicios.

Los objetos que se exponen son únicos y extraños, procedentes del mundo de la magia, de lo sobrenatural y lo oculto como son las momias, hadas, ángeles y monstruos mitológicos. Unas piezas que datan desde el siglo XVI hasta principios del XX y que forman parte de la muestra.

Los clásicos ingredientes para elaborar las pociones mágicas como plantas venenosas, animales ponzoñosos, piel disecada de lombriz, mandrágoras y víboras, hasta el 'libro de las invocaciones' son, además, algunas de las curiosidades de la muestra, que pretende explicar el mundo de la brujería desde un punto de vista antropológico.

Otro apartado exhibe las más extrañas formas de animales. La anfisbena, un anfibio con dos cabezas; el serpione, mitad serpiente y mitad escorpión; una enorme tarántula felina y el especimen más emblemático entre las brujas: el gato, aunque no es negro como lo pintan, sino gris y de doble cabeza.

La tortura contra quienes osaban ser diferentes también está presente con los artefactos de castigo. Se aprecian objetos como el instrumento para desollar, la pinza para arrancar pezones, el revienta vientres, el aplasta cabezas y la mesa para destripar.

La exposición ‘Brujería: Insólitos objetos y fantásticas criaturas’ trata de descubrir la brujería clásica constituida por la búsqueda del equilibrio entre el mundo terrenal y el mágico, que recientemente ha derivado más en rituales meramente individuales en la búsqueda de favores personales.

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