Diez colegios públicos riojanos muestran su apoyo a Serise y dicen no al pin parental

La polémica surgida en torno al veto parental ha llevado a pronunciarse a las AMPAS de diez colegios logroñeses que, aseguran “conocen de primera mano el admirable trabajo que realiza Serise”, el cual apoyan en su contenido y método.

Además, quieren seguir su derecho a alegir la educación que quieren “de forma pacífica” “Queremos disfrutar de la elección que hicimos en su día, que nadie se arrogue la la facultad de hablar con nosotros. No queremos que ningún colectivo vuelva a esgrimir la defensa de nuestros menores como instrumento sensacionalista o publicitarlo. No lo hemos pedido, no lo hemos buscado. No lo necesitamos porque somos conscientes de su elección”.

Para estas AMPAS, los padres y madres que deseen otra educación pueden eligirla, “optando por un centro con otro modelo educativo”, pero exigen que cesen los hostigamientos a su elección, al personal de sus centros, a los profesionales externos que han contratado y a sus hijos e hijas.

Han firmado este comunicado las AMPAS de los colegios Las Gaunas, Vicente Ochoa, Siete Infantes de Lara, Gonzalo de Berceo, Obispo Blanco Nájera, Navarrete el Mudo, Milenario de la Lengua, Villa Patro, Doctor Castroviejo y Caballero de la Rosa.

Serise Sexología ha agradecido este apoyo en redes sociales.

“Intromisión en la autonomía de los centros”

También se ha pronunciado la la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de centros públicos de La Rioja (FAPA-Rioja), que agrupa a 108 asociaciones. Este colectivo ha querido dejar claro que consideran “una intromisión en la autonomía de los centros educativos” vetar algún tipo de formación.

En una entrada en su blog, subrayan que “uno de los fines de la educación es el desarrollo de las capacidades afectivas del alumnado, la formación en el respeto de los derechos y libertades fundamentales, de la igualdad efectiva de oportunidades entre hombres y mujeres, y el reconocimiento de la diversidad afectivo-sexual”.

Consideran que “el alumnado debe recibir una educación integral basada en valores colectivos e inclusivos” y muestran su confianza en sus equipos directivos, claustros de profesores y profesoras y en los consejos escolares, que, basados en la legislación, crean la planificación educativa de los centros “buscando el mejor desarrollo de nuestros hijos e hijas”.

“El conocimiento y la integración de los principios de respeto por la diversidad son derechos del alumnado que cursa estudios en nuestro sistema educativo, y que, por tanto, no pueden ser cambiados por el interés particular de personas u organizaciones, sea cual sea su ideología”, detallan.

Por ello proponen la implantación dentro del currículum educativo de una educación afectivo sexual de forma reglada por cursos, que favorezca su estabilidad en todos los centros educativos.

Por último, quieren dar su apoyo a las Ampas, equipos directivos, profesores y profesoras, asociaciones y empresas que colaboran con los centros educativos con sus charlas y talleres, “a todos los que día tras día dedican lo mejor de ellos para crear un mundo mejor para todos y todas”.