El Gobierno presentará un plan de formación para rescatar a 600.000 parados

Un 12% de los desempleados actuales, es decir 600.000 parados, no tienen formación. Pertenecían a los sectores que se beneficiaron del boom de la construcción y sectores satélite que se han venido abajo en estos casi cuatro años de crisis y caída en picado. Son jóvenes que decidieron abandonar sus estudios en búsqueda de un trabajo remunerado y del que pensaban que iban a obtener un rédito infinito. No fue así y ahora con cinco millones de parados en las listas del paro, Trabajo intenta dar con la solución para volver a insertarlos en el mercado laboral y esto pasa por una formación educativa, es decir, reinsertarlos en planes de formación intensivos para que obtengan a medio plazo un empleo.

En un principio se pensó en un incentivo económico para animar a estos jóvenes a comenzar a formarse y obtener una titulación o cualificación que respaldara los conocimientos que fueran adquiridos, pero el escaso margen de maniobra del que goza el Gobierno ha dado al traste con la pretensión inicial, de tal modo que con un colchón de gastón mínimo ha habido que estudiar otro tipo de iniciativas, entre las que se baraja la formación intensiva en un período de tiempo corto que les asegure un empleo. De esta manera también se alivirían las colas del paro y las cfiras de desempleo.

Así pues, Valeriano Gómez analiza con sus colaboradores el incentivo idóneo, aunque se descarta casi con seguridad esa remuneración por el hecho de matricularse. Se piensa en hacer un curso de al menos unos 400 horas anuales de forma intensiva o bien fraccionada en el tiempo. Con ello, además, los servicios públicos no contarían que estas personas están desempleadas por lo que bajaría la cuota del 20%, ya que estaríamos hablando de personas en formación y no en disposición de encontrar empleo.

Pero, además en el Gobierno de Zapatero preocupa que un dato positivo cómo es la reactivación del mercado laboral apee a estos jóvenes sin formación y se convierta en un quiste para los servicios públicos de desempleo al no poder reinsetarse, en caso de que los programas de formación sean de larga duración. De esta manera, Trabajo baraja la posibilidad de cerrar períodos cortos o medios de formación a través de la oferta pública de cursos o talleres o bien de la formación profesional.

En este sentido ya ha habido encuentros entre empresarios, sindicatos y Gobiernos. Por otro lado, sigue en pie el programa Prepara, que ofrece una renta de 400 euros a alrededor de 100.000 personas que están apuntadas en programas de formación. Es la segunda versión de la ayuda de los 426 euros para aquellos parados de larga duración, que en función de las características y circunstaciones personales o familiares han venido recibiendo hasta su suspensión a principios de año.