Investigación vigilada
El pasado mes de septiembre se puso en marcha, en el Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR), el primer animalario de la Comunidad Autónoma destinado a la experimentación e investigación biomédica, mediante la utilización de cobayas, tanto roedores (rata y ratón) como lagomorfos (conejos).
La función principal de un animalario es mantener en perfectas condiciones sanitarias a los animales que se encuentren en sus dependencias. Para ello, tal y como se anunció en la inauguración del animalario, Salud ha constituido ya el Comité de Ética y Experimentación Animal del CIBIR, órgano que evalúa y garantiza que todos los procedimientos que se desarrollan en dicho centro de investigación, en relación con los animales, se lleven a cabo de acuerdo con los requisitos éticos y legales correspondientes.
El Comité de Ética y Experimentación Animal evaluará todos los procedimientos y proyectos de investigación que incluyan animales de experimentación, revisará los procedimientos ya evaluados y estará capacitado para suspender cualquier procedimiento ya iniciado que no se ajuste a los requisitos establecidos.
Asimismo, el Comité deberá informar de la idoneidad de cada procedimiento en relación con los objetivos del estudio que se esté llevando a cabo, la posibilidad de alcanzar conclusiones válidas con el menor número posible de animales, la consideración de métodos alternativos a la utilización de los animales y la idoneidad de las especies seleccionadas.
Otra de las funciones del Comité es garantizar que se ponen los medios para que los animales no sufran innecesariamente y que el personal que participa en los procedimientos tenga la formación adecuada para llevar a cabo las tareas que se le encomienden.
Actualmente, el Comité de Ética y Experimentación Animal está compuesto por Teresa de la Cueva (responsable de bienestar y salud animal), Eduardo Mirpuri (presidente), Alfredo Martínez y Ana María Lacosta (vocales).
0