La leucemia como enfermedad crónica
Según nuevos datos obtenidos del ensayo clínico a mayor escala realizado en pacientes con un tipo de leucemia potencialmente mortal (leucemia mieloide crónica) de nuevo diagnóstico, el uso prolongado de Glivec (imatinib) puede detener la progresión a fases avanzadas de la enfermedad a los seis años de tratamiento.
Los resultados del estudio IRIS revelan que, tras dos años de tratamiento, la progresión de la enfermedad disminuye constantemente. Además, la supervivencia global estimada a los seis años en los pacientes tratados con Glivec es del 88%.
Los investigadores principales presentaron los últimos datos de este estudio de referencia en la reunión anual de la American Society of Hematology (ASH); en el ensayo, participaron más de 1.100 pacientes con leucemia mieloide crónica (LMC) con cromosoma Filadelfia (Ph+) de nuevo
diagnóstico.
Los pacientes con LMC en fase inicial (crónica) que recibieron tratamiento continuado con Glivec no progresaron a las fases avanzadas de la enfermedad. Si no se trata, la LMC progresa típicamente en 3-5 años desde la fase inicial a través de una fase de transición (acelerada) a una forma rápidamente mortal denominada crisis blástica.
“Si esta tendencia de supervivencia prosigue, muchos pacientes con LMC pueden aproximarse a una esperanza de vida normal con el tratamiento continuado con Glivec,” ha dicho el Dr. Brian Druker, director del Cancer Institute Center de la Oregon Health & Science University;
cátedro JELD-WEN de investigación sobre leucemia, investigador del Howard Hughes Medical Institute y miembro de la National Academy of Sciences.
La mayoría de los pacientes con LMC se encuentran en fase crónica en el momento del diagnóstico de la enfermedad. Cuando todavía no se disponía de Glivec, cerca del 50% de los pacientes con LMC Ph+ progresaba desde la fase inicial a fases más avanzadas después de tan sólo 3-5 años. Cuando los pacientes llegaban a la fase de crisis blástica, la supervivencia era generalmente de 3-6 meses.
La supervivencia global estimada en los pacientes tratados con Glivec fue del 88% teniendo en cuenta las muertes por todas las causas. Cuando se excluyeron las muertes por causas no relacionadas con LMC o las producidas después de trasplante, la supervivencia global estimada fue del 95%. Menos del 5% de los pacientes falleció debido a LMC.
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