“La Rioja está llena de misterios relacionados con reliquias”

La vida está llena de misterios, muchos de ellos sin explicación científica. Esta lucha entre la ciencia y lo milagroso queda plasmada en la nueva novela de Javier Sierra “La Dama Azul”. El libro cuenta la historia de Sor María Jesús, una monja de clausura que sin salir de su celda de un convento en Soria fue capaz de predicar el cristianismo en América. Este fenómeno se denomina “bilocación” y tiene incluso una explicación ciéntifica.

“En la presentación del libro en Madrid, conté incluso con un miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas” afirma Javier Sierra. “Él mismo refutó la teoría de que una partícula pueda estar a la vez en varios lugares, y si una parte de la materia lo puede hacer, ¿porqué no un cuerpo?

Sierra, conocido por el gran público a través de programas como Crónicas Marcianas donde comentaba fenómenos paranormales o mitológicos es un enamorado de la Civilización Egipcia. No ha sido el único. El mismísimo Napoléon Bonaparte pasó una noche dentro del vientre de la Gran Pirámide. Cuando fue preguntado por lo ocurrido allí, dijo “Aunque os lo contara, nunca me creeríais.” Por ello, este joven turolense quiso experimentar esa sensación. “Y pasé mucho miedo”,dice, aunque tampoco relata lo que vió.

Su obra se basa en esta temática sobre las religiones y sus misterios. “La cena secreta” una de sus novelas se convirtió en un auténtico betseller. En ella aborda los secretos de la pintura de Leonardo Da Vinci y su relación con la Iglesia Católica. “Es una institución que calla muchos misterios. De hecho, es la única que posee un archivo histórico con más de mil años, con todo lo que ello conlleva.”

“En La Rioja han existido multitud de misterios, sobre todo relacionados con la aparición de reliquias y cuerpos incorruptos. En mi libro, 'La Dama Azul', narro la existencia de una copia de la Sábana Santa aparecida en un pueblo de La Rioja, Laguna en Cameros”.

Preguntado sobre el boom de la literatura de misterios históricos, Sierra tiene muy claro las razones: “En primer lugar, porque tendemos a una sociedad occidental cada vez más laica, el ciudadano busca respuestas en estos libros sobre el origen histórico de su sociedad o incluso de la arquitectura de la catedral de su ciudad.” La segunda razón, la data Sierra tras la Guerra de Irak. “Fue entonces cuanto occidente comenzó a desconfiar de la buena fe de unos gobernantes, que mediante mentiras habían comenzado una guerra. Buscamos nuestras propias respuestas, porque ya no nos fiamos de los gobiernos.”