Personas mayores versus personas jóvenes

En verano es cuando quizás los efectos del cambio climático son más visibles y pasan factura en forma de olas de calor. Año tras año se repite el mismo escenario, con temperaturas que baten cualquier registro anterior y que ponen en alerta a la población para sobrellevarlas. Cuando se aproxima una de estas olas, nos advierten desde los distintos medios de comunicación y desde los representantes sanitarios de las precauciones que se deben tomar y de cuáles son los grupos de más riesgo. “Las personas mayores, es decir, las personas de 60 o más años, son uno de los grupos de riesgo cuando el calor aprieta y esto se debe principalmente a que sus patologías pueden agravarse con la elevación de su temperatura corporal, sin embargo, no son un grupo de riesgo en muchos otros aspectos” comentan desde Cuidelia. Este año, la primera ola del verano, se cobró 18 vidas.

La población mundial está envejeciendo. Es un hecho el número de personas mayores está aumentando año tras año y es que, según los datos de la revisión de 2017 del informe ‘Perspectivas de la Población Mundial’, se espera que el número se duplique para 2050 y se triplique para 2100, pasando de los 962 millones actuales a 2100 y 3100 millones, respectivamente.

A pesar de que una minoría todavía cree que tienen poco que aportar, no se debe olvidar que las personas mayores se han convertido, hoy en día, en los pilares fundamentales de muchas familias y se las percibe cada vez más como elemento fundamental para el desarrollo.

El mejor estado de salud en el que hoy se llega a la tercera edad y el incremento en los años de esperanza de vida hace que la figura de los abuelos haya vuelto a cobrar importancia en la familia, ofreciendo además un papel útil lejos del clásico anciano del rincón.

Los expertos ya hablan de algunas de las ventajas de llegar a esta edad:

- El rendimiento cognitivo de los personas mayores es mejor, más organizado y más consciente que el de los más jóvenes, según un estudio realizado por el Instituto Max Planck de Berlín para el Desarrollo Humano, que sometió a ambos grupos a las mismas pruebas.

- Las reacciones de las personas mayores son más lentas que las de las personas más jóvenes debido a que sus cerebros son una fuente biológica de sabiduría. Además, la nostalgia, algo tan característico de los mayores, posee una gran cantidad de beneficios de salud y psicológicos.

- Los mayores muestran menos síntomas de ira y ansiedad cuando las cosas no salen como debieran y su manejo del estrés es mucho mejor que el de los jóvenes.

Desde Cuidelia corroboran lo anterior “la experiencia adquirida desarrollando nuestra labor a lo largo de los años nos ha demostrado que las personas mayores son mejores que las jóvenes en diversos aspectos, son por ejemplo mucho más pacientes y calmados, más agradecidos y más cariñosos”.