Steegmans vence en el infierno

El ciclista belga Gert Steegmans (Quick Step) se hizo con la victoria en la primera etapa de la París-Niza, que tuvo que ser recortada en más de 90 kilómetros, mientras que el noruego Thor Hushovd (Credit Agricole) continúa como líder de la general. El día amaneció con fuertes vientos y lluvia, y los organizadores de la carrera se vieron obligados a recortar la etapa que debía llevar a los ciclistas desde Amilly hasta Nevers, con 184,5 kilómetros, debido a la peligrosidad.

La dirección de la prueba decidió neutralizar el inicio de la etapa y trasladó a los participantes en autobús hasta La Chapelotte, desde donde se dio la salida a una jornada, donde la climatología azotó a los ciclistas, que sufrieron en sus carnes una etapa muy dura, donde el perjudicado fue el australiano Cadel Evans (Silence-Lotto). El segundo clasificado del pasado Tour de Francia sufrió una caída y se quedó cortado cediendo en la línea de meta más de dos minutos y medio que le complican muchos sus opciones de victoria.

De todos modos, la lluvia y el viento provocaron varios cortes, pero no evitaron que los 'aventureros' les desafiasen. Así, el austriaco Bernhard Eisel (Team High Road), el holandés Niki Terpstra y el eslovaco Peter Velits, ambos del Milram, probaron suerte y llegaron a contar con más de cuatro minutos de renta. Sin embargo, el grupo perseguidor, con el líder Thor Hushovd, no dio demasiadas concesiones y les capturó en el tramo final de la etapa, que se decidiría al sprint, complicado y de fuerza, dado que la meta estaba situada en una pendiente del siete por ciento.

Los ojos estaban puestos en el belga Philippe Gilbert (Francaise des Jeux), en gran momento de forma, pero fue un compatriota, Gert Steegmans, el que lanzó un ataque a 300 metros para cobrar una ventaja que no pudo ser enjugada ni por el francés Jerome Pineau ni por Hushovd, que mantuvo de todos modos el liderato en la general. Este martes se disputará la segunda etapa de esta París-Niza, que llevará a los ciclistas desde Nevers hasta Belleville, con más de 200 kilómetros y con un final plagado de cotas, una de ellas, el Col du Fût d'Avenas, de segunda categoría y situado a 20 kilómetros de la meta.