Comienzan las obras para reverdecer la plaza más calurosa de Madrid

El Ayuntamiento de Madrid arranca este lunes los primeros trabajos para reformar uno de los espacios más calurosos de la ciudad, la plaza del Rastrillo, al que dotará de más árboles y hasta una fuente ornamental, en una obra que se extenderá también a las calles aledañas.

Por una de estas calles -la de Tesoro- comenzará la actuación el 7 de julio, según los carteles que han colocado por los portales las empresas Licuas y Azvi, que se encargarán de ejecutar la obra y que avisan del corte al tráfico del primer tramo de la calle, así como de las restricciones en el acceso a los garajes.

El área de Obras tiene como objetivo principal regenerar una plaza “que se encuentra muy degradada”, explicaba hace unos meses en nota de prensa, dotándola de mayor confort ambiental y la plantación de hasta 69 árboles en todo el entorno y unos 340 arbustos en Rastrillo y las calles que confluyen en ella: Espíritu Santo, Tesoro, San Andrés y Marqués de Santa Ana.

Para completar el refresco del entorno, la plaza contará con una fuente ornamental circular de cuatro metros de diámetro y se colocará un elemento pulverizador de agua para el verano. Habrá también una reordenación del espacio de terrazas, que actualmente ocupan buena parte de la plaza.

La plaza fue identificada como el punto más cálido de Madrid en un estudio publicado hace dos años, en el que se indicaba que en su centro se alcanzaban hasta 8ºC más que en la Casa de Campo en el mismo día. La plaza del Rastrillo, (antes denominada con el nombre del franquista Juan Pujol), está situada a tres manzanas del Dos de Mayo.

El espacio adolece actualmente de zonas verdes, con solo un 3% de vegetación según el trabajo publicado en el año 2023 y un 90% de espacios impermeables, que retienen el calor. Todos estos elementos han sido estudiados por el área de Obras, que además del verde añadirá pavimentos filtrantes y numerosos árboles de alineación en Espíritu Santo, Tesoro y San Andrés.

Los trabajos se extenderán a lo largo de lo que queda de año y el área de Obras estima que se pueden alargar en total unos diez meses, siempre teniendo en cuenta que los plazos pueden variar por visicitudes de las obras. Siguiendo estos tiempos, el resultado final se verá a lo largo del 2026, probablemente antes de que acabe la primavera.