El cultivo de interior gana presencia en los barrios de las grandes ciudades
Con el amor por los alimentos 100% naturales en auge y, sobre todo, la preocupación por los perjuicios de los alimentos con aditivos y otras sustancias poco aconsejables para el organismo, algunos vecinos de barrios de grandes ciudades están apostando por una tendencia al alza: en lugar de comprar verduras y hortalizas comienzan a experimentar con pequeñas plantaciones en casa, con el cultivo de interior.
Por supuesto, no es algo que se puede hacer sin antes realizar ciertos preparativos. No basta solo con comprar las semillas, un par de maceteros, fertilizante y muchas dosis de paciencia. Además de tener los conocimientos necesarios, también es importante disponer tanto de las instalaciones adecuadas como de las condiciones climáticas adecuadas.
Todo el mundo sabe que hay plantas que solo están habituadas a determinadas condiciones y sacarlas de ese contexto provoca que mueran prematuramente o que, por contra, ni siquiera crezcan cuando. Por eso, la solución del armario de cultivo está ganando tanto peso.
Los armarios de cultivo permiten reservar un rincón de la vivienda para que goce de un microclima en su interior, permitiendo ajustar tanto la temperatura como la iluminación o la humedad. De este modo, no importa nunca las condiciones atmosféricas que haya fuera o alrededor y es posible plantar prácticamente cualquier cosa en su interior, asegurándonos de que crezca como es debido.
Este sistema posibilita controlar la plantación, por pequeña que sea, pero también garantiza al consumidor saber cómo se ha tratado la verdura antes de llevarla a la cocina. Cuando es uno quien se encarga de cuidarla, procura que no lleve ni pesticidas ni nada que, luego, pueda ser perjudicial para su salud.
Los hay que tienen la ventaja de gozar de un pequeño patio en su piso o en su casa, o de una terracita o balcón, pudiendo así tener algo más de flexibilidad para plantar y aprovechar la luz del sol, el agua de la lluvia y todos los agentes meteorológicos que propician el crecimiento y desarrollo de las plantas para su posterior consumo. Sin embargo, quienes no se encuentran en esa situación privilegiada deben buscar otras vías, con la solución de los armarios de cultivo de interior como la favorita.
¿Es suficiente con estos armarios de cultivo para plantar en casa?
¿Es suficiente con estos armarios de cultivo para plantar en casa?
La respuesta corta es, sin duda alguna, no; la larga es que hacen falta bastantes más utensilios para asegurarte de que esas verduras que quieres comer, o las hortalizas que vas a cocinar, puedan salir de las semillas que has comprado. El proceso no es ni tan fácil ni tan corto como muchos piensan.
Si bien es cierto que algunos armarios vienen acompañados de unos kits la mar de completos, con temporizadores, ventiladores, lámparas e incluso guantes; los más básicos se olvidan de todo eso y requieren tanto imaginación como alguna que otra compra adicional.
Desde la tierra para plantar hasta el fertilizante para que las hortalizas se nutran bien, pasando por sistemas de regado reducidos, lámparas extra y una serie de herramientas indispensables para tratar la tierra y adecuarla para lo que se vaya a plantar. Como decíamos, no es tan fácil como parece, aunque los resultados, a la larga, se agradecen muchísimo.
Afortunadamente, hay muchos comercios especializados en este terreno. Desde tiendas de lo más tradicional hasta comercios online se han centrado en ofrecer las mejores soluciones para que esta nueva oleada de “agricultores de andar por casa” puedan montar una buena despensa de hortalizas y verduras en su hogar.
En muchas ciudades algunos habitantes están volviendo a los hábitos más antiguos para desprenderse de todas esas capas innecesarias que envuelven a los alimentos modernos y volver a lo que es verdaderamente saludable.
Un planteamiento que está ganando muchísima popularidad por provocar unos efectos notablemente beneficiosos en la salud. Cada vez hay una mayor conciencia sobre los importante que es comer sano y eso no solo está provocando un importante efecto sobre las dietas habituales en los hogares, sino también en los alimentos que se emplean para construirlas.
Además de los beneficios para la salud de comer sano y el control sobre la procedencia de los alimentos que nos da plantarlos y criarlos nosotros mismos, no hay que olvidar el componente de hobby, altamente recomendable y beneficioso para la mente de quien lo practica, que supone el mundo del cultivo. Y tú, ¿te animas a montar un huerto en casa?
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