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La ballena entre la multitud

Luis de la Cruz

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Lo maravilloso de los lugares es que mutan al contacto con las historias de la gente. Muy poca gente tenía aún cosida a su vida la marquesina del tren de cercanías en la Puerta del Sol, que está entre nosotros hace apenas

un par de años. La entrada, concebida por arquitecto y académico de Bellas Artes Antonio Fernández Alba, se ha convertido de manera inesperada en el eje de las fotografías que inundan estos días el mundo.

El álbum de fotos de la Puerta del Sol -en niguna imagen saldrá puerta alguna- discurre entre distintas tonalidades: blanco y negro, sepias, tonos polaroid, color...al compás de los pasos de la historia. El asesinto de Canalejas, el advenimiento jubiloso de la República, el 23-F o los días corrientes del hashtag. También hubo fotos de viajes siniestros justo donde se ven las lecheras de la policía hoy, custodiando la sede de la Comunidad de Madrid. Allí estuvieron los calabozos de de la Dirección General de Seguridad donde tanto se reprimió en otras batallas.

En la fotografía de Sol de estos días emerge la ballena como símbolo de la reapropiación del espacio público y la recuperación de la plaza como centro de la política. No de la política “con mayúsculas”. De la política, a secas. A los cristales triángulares de la marquesina del cercanías le nacen consignas de todo tipo, ideas tendidas al sol como la ropa de la acampada, y al cetáceo de cristal marineros en el lomo, jovenes que no se quieren perder la cita de su generación.

El 15 de mayo una marea humana sin pastores llegaba a Sol y allí se quedó, acampando en el centro de la rabia y la ilusión de miles de personas, las mismas que cada noche vuelven esta semana a reclamar “su plaza”, a ocupar el graderío de los andamios armados en algunos de sus edificios y gritar sin miedo que no hay autoridad que les desaloje de una plaza que ya se ha rebautizado en carteles artesanales como Plaza de la Solución.

Nadie sabe aún que pasará con este fenómeno cuando se corte el streaming, pero la foto de la década ya está hecha en la plaza de Sol, tiene un autor múltiple y sale una ballena emergiendo entre la multitud.

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