El soterramiento de Parque Castellana causa nuevos cortes al tráfico con la vista puesta en la Operación Chamartín

El proyecto para soterrar el icónico Paseo de la Castellana entre la calle Sinesio Delgado y el Nudo Norte de la M-30 entra en su segunda etapa de obras, una fase que se alargará hasta diciembre de 2026 según la previsión inicial. Los trabajos comenzaron en julio y este lunes se inician nuevas actuaciones que obligan a cerrar, en ambos sentidos, los dos carriles centrales del tramo afectado para avanzar en el futuro paso subterráneo. Durante todo el proceso, el Ayuntamiento de Madrid mantendrá abiertas las dos calzadas laterales: para el trayecto norte-sur se dejarán dos carriles disponibles y tres para el sentido inverso, uno de ellos reservado para los autobuses con salida directa al Nudo Norte.

Los pliegos del contrato, formalizado el pasado mes de febrero, establecían un plazo de cuatro meses para que el adjudicatario redactase el proyecto de ejecución, complementando así el proyecto básico presentado a la licitación con los requerimientos efectuados por los distintos servicios municipales. Fruto de este proceso, se han incorporado al proyecto importantes mejoras por valor de 9,8 millones de euros, de manera que el presupuesto final de Parque Castellana será de 110,2 millones de euros.

Para construir el túnel se seguirá una técnica de cortar y cubrir; es decir, se levantarán primero los muros de contención gracias a pantallas de pilotes, que permitirán contener la tierra. Luego, se iniciará la excavación. Con el objetivo de aminorar las consecuencias para el tráfico habitual, el consistorio ha establecido un plan especial de movilidad con varios desvíos recomendados para moverse por la zona, aunque la recomendación fundamental es usar el transporte público en lugar de un vehículo privado.

Alternativas de movilidad recomendadas para esquivar las obras

De un lado, se pondrán en marcha itinerarios alternativos hacia la M-30, la M-607 y la A-1 y se desplegará un dispositivo de Policía Municipal y Agentes de Movilidad que regulará el tráfico en la zona.

Líneas afectadas de metro o autobuses y refuerzos en la EMT

Por otro lado, tanto la Empresa Municipal de Transportes (EMT Madrid) como el Consorcio Regional de Transportes han alterado su servicio por las obras. En total, se verán afectadas 13 líneas de EMT Madrid (11 diurnas, una nocturna y un servicio especial) y 34 líneas interurbanas de los corredores de la A-1 y la M-607, con paradas provisionales habilitadas en Ginzo de Limia y en el entorno de Cuatro Torres para facilitar el acceso a La Paz y al metro.

Las líneas nocturnas mantendrán sus trayectos habituales. Además, la línea 10 de Metro contará con refuerzo de frecuencia los días laborables entre las 6.05 y las 22 horas. La información detallada sobre los servicios y posibles alteraciones podrá consultarse en las páginas web de EMT Madrid y del Consorcio Regional de Transportes de Madrid.

El soterramiento tendrá una longitud de 675 metros y una anchura de 90 metros y generará un espacio de 70.000 metros cuadrados en superficie para el parque, lo que permitirá la integración como un solo ámbito continuo del entorno de las cinco torres y el hospital de La Paz con la antigua colonia de San Cristóbal y el futuro centro de negocios que contempla Madrid Nuevo Norte (nombre oficial con el que se conoce la conocida como Operación Chamartín). Asimismo, el proyecto supondrá la materialización del remate norte del paseo de la Castellana como eje estructurante norte-sur de la ciudad. Una vez construido el túnel, en superficie solo circulará el transporte público y el tráfico local de acceso a los edificios.

El espacio que se generará por encima del paso subterráneo estará compuesto de varias zonas diferenciadas que en su conjunto formarán un nuevo parque urbano con numerosas áreas estanciales, de recreo y de paseo. Se plantarán un total de 787 nuevos árboles a los que se sumarán 38.000 arbustos.