Un físico argentino desaparecido durante la dictadura informa que está vivo en EE.UU.

Un físico nuclear licenciado por el Instituto Balseiro de Argentina y marcado como desaparecido de la última dictadura militar del país (1976-1983) estableció contacto con esa institución para confirmar que está vivo y que reside en Estados Unidos, según confirmaron a Efe fuentes oficiales.

“Ellos me han ratificado que sí, que han tenido la suerte de poder establecer contacto con Gentile (persona en cuestión), que este hombre se comunicó y que está en perfecto estado de salud”, aclaró a Efe el secretario de Derechos Humanos del país austral, Claudio Avruj.

En 1977 se perdió el rastro de Antonio Gentile -nacido en 1933 en la localidad bonaerense de Mar del Plata-, quien estudió en el Instituto Balseiro de Bariloche (provincia de Río Negro) y figura en la lista de científicos desaparecidos de esa escuela junto a Susana Grinberg, Eduardo Pasquini y Manuel Tarchitzky.

Según explicó el titular de Derechos Humanos, en 2015 se recibió en esa secretaría, en la provincia de Río Negro, la denuncia formal de desaparición por parte de excompañeros del entorno científico de Gentile y se procedió a abrir un expediente para incluirle en la Comisión Nacional sobre Desaparición de Personas (Conadep).

Las últimas informaciones que apuntaron a Gentile en la década de los setenta hacen referencia a que, supuestamente, este viajaba de Nueva York a Buenos Aires para buscar a una hermana suya que había sido secuestrada durante la dictadura.

No obstante, Avruj afirmó que en la Conadep, que registra más de 9.000 casos, aparecen dos mujeres con el mismo apellido pero no hay constancia, por el momento, de que ninguna sea su pariente.

Los familiares de Gentile, especifica Avruj, nunca solicitaron ni recibieron la indemnización económica que se otorga a los familiares de las personas fallecidas a causa del régimen de facto y que recoge la ley argentina de reparación.

Debido a las extrañas circunstancias en las que se dio a conocer que Gentile sigue vivo -teniendo en cuenta que el Instituto Balseiro recibió esta información hace varias semanas pero no lo manifestó-, el caso ha suscitado reacciones que ponen en duda la labor de los organismos que trabajan por encontrar a estas personas.

“En absoluto este hecho mancha todo el trabajo que se ha hecho por la búsqueda de las personas desaparecidas. Es un capítulo de la búsqueda, de alguien que no se sabía el paradero, pero no se puede banalizar el drama de las víctimas del terrorismo de Estado y de los organismos de derechos humanos”, concluyó.

Gentile fue docente entre los años 50 y 60 en la Universidad de Buenos Aires y desarrolló gran parte de su carrera científica en la Comisión Nacional de Energía Atómica, tras lo cual se mudó a Estados Unidos para continuar con su trabajo en otra universidad.