PP y PSOE, que quedaron como los dos partidos más votados en las Elecciones Generales del 26J, fueron también las formaciones más favorecidas por el sistema electoral. En el caso de los populares, la diferencia entre el porcentaje de votos y el porcentaje de escaños alcanzó en estas elecciones los 6,1 puntos de diferencia; en el caso del partido socialista, los 1,6 puntos. Estas cifras reflejan la diferencia entre el modelo actual, donde la provincia es la circunscripción, y sistema perfectamente proporcional. Por el lado contrario, C's se situó como el partido más perjudicado con -3,9 puntos entre su porcentaje de votos y su proporción de escaños. Precisamente, Rivera fue el más crítico con el sistema electoral, echándole la culpa a los resultados electorales del 26J.