La Audiencia de Barcelona ha absuelto de un delito contra la integridad moral a tres hombres que habían sido condenados en primera instancia por humillar a dos transexuales antes de agredirlas. La razón que esgrimen los magistrados es que los tres hombres “probablemente” no sabían que las víctimas eran transexuales cuando les preguntaron por el precio a pagar a cambio de servicios sexuales, y, en consecuencia, no cabe hablar de menosprecio a una orientación sexual que desconocían. Para el cuarto condenado sí se ha mantenido la pena de prisión impuesta en primera instancia, ya que los magistrados sí creen que insultó a la tercera víctima al grito de “maricón”. Escribe Oriol Solé.