Mariano Rajoy ha hecho dos actos de campaña en Toledo para apoyar de nuevo a María Dolores de Cospedal como número uno de su lista. En Torrijos, el líder del PP le ha agradecido su labor al frente de la secretaría general desde 2008 y ha asegurado que su gestión como presidenta autonómica fue “la mejor desde 1983”. Pero su preocupación es que el voto a Ciudadanos impida al PP lograr más escaños y ha vuelto a pedir que no se “desperdicie para la causa de la moderación”, como en su opinión sucedió en las pasadas autonómicas, donde le faltó un escaño pero los votos al partido de Rivera no se tradujeron en diputados: “Si ese voto se hubiera concentrado en el PP, hoy María Dolores seria presidenta.”.
Como había hecho por la mañana, en La Puebla de Montalbán, Rajoy ha pedido “lealtad” al votante para que no cambie de siglas y a sus militantes que se vuelquen en convencer a los indecisos “y a toda la gente templada que quiere seguridad y no aventuras”.
Antes, Cospedal se había dirigido a los asistentes, mayoritariamente pensionistas, para azuzar el miedo sobre la seguridad de sus ingresos: “Quieren asaltar el cielo y eso es lo que hacen cuando bajan las pensiones, asaltar”. La candidata del PP ha asegurado estar harta de las críticas por los recortes: “¡Ya está bien de oír a la izquierda radical hablando de recortes!
Para el 26H, estos han sido sus consejos: “Sánchez, con su pataleta de querer ser presidente, no se quiso sentar con nosotros y por eso estamos aquí. Tenemos que tener bien claro para qué va a valer el voto. No nos podemos equivocar, ¿eh?”.