A su juicio, la declaración de independencia “existió”, pero fue “un acto parlamentario” y de carácter “simbólico” en la medida que la república “no fue implementada” y el Govern no llegó a firmar ningún decreto para aplicarla. “Se quedó en el marco de la declaración en sede parlamentaria”, ha reconocido.
Para el diputado independentista, “cada uno podría interpretar qué se entiende por simbólica”, pero en todo caso sostiene que no hubo engaño ya que las personas que votaron “sabían perfectamente” lo que había ocurrido.