El futbolista del Real Madrid Vinícius Junior ha criticado que los episodios de racismo que ha vivido no han sido “casos aislados” sino que ha tenido “una sorpresa desagradable” en cada partido fuera de casa, y ha lamentado que no se estén tomando medidas ni contra los implicados ni contra los equipos. El jugador ha recibido muestras de solidaridad por todo el mundo, incluido el presidente de su país, Lula da Silva. En Río de Janeiro, el Cristo Redentor apagó sus luces durante una hora como acción de protesta: “Me emociona. Pero sobre todo quiero inspirar y traer más luz a nuestra lucha (...) Tengo un propósito y si tengo que sufrir más para que las futuras generaciones no pasen por situaciones parecidas, estoy preparado”, ha dicho.
Para Vinícius, el discurso “siempre cae en que son 'casos aislados' o 'un hincha'”. “No, no son casos aislados. Son episodios continuos repartidos por varias ciudades de España (e incluso en un programa de televisión)”, ha escrito, acompañando su mensaje de un vídeo en el que se recopilan los hechos. El futbolista se pregunta de cuántos de esos “racistas” se ha publicado su nombre y su foto, y lamenta que de “ninguno”.
“¿Qué falta para criminalizar a estas personas? ¿Y castigar deportivamente a los clubes? ¿Por qué los patrocinadores no cobran a LaLiga? ¿No se sienten incómodas las televisiones por retransmitir esta barbaridad todos los fines de semana? El problema es muy grave y los comunicados ya no funcionan. Tampoco culparme para justificar actos delictivos. No es fútbol, es inhumano”, ha señalado.