La vicepresidenta apela en Euskadi al diálogo y al acuerdo sin imposiciones

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha apelado hoy en Euskadi al diálogo y al acuerdo como método de trabajo entre las administraciones, cada una con su “propia voz” pero sin “imposiciones”.

La vicepresidenta ha presidido en Vitoria el acto de jura de Javier de Andrés como nuevo delegado del Gobierno en el País Vasco en sustitución de Carlos Urquijo.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, como ya avanzó la semana pasada, no ha asistido al considerar que la figura del delegado del Gobierno “no tiene sentido” en una autonomía como Euskadi “con un régimen singular”, aunque pese a estas declaraciones sí que ha habido representación del Gobierno Vasco bipartito PNV-PSE.

Ha estado presente el consejero de Gobernanza Pública y Autogobierno, Josu Erkoreka (PNV), y el titular del Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda, Iñaki Arriola (PSE-EE), además de una delegación del PP vasco encabezada por su presidente, Alfonso Alonso, mientras que no han asistido representantes de EH Bildu ni de Podemos.

Antes del inicio del acto, la vicepresidenta se ha reunido brevemente con Erkoreka y Arriola en presencia de Alonso, del nuevo delegado y del saliente, y, tras la toma de posesión de De Andrés, han vuelto a charlar en presencia de los medios de comunicación, aunque no ha trascendido el contenido de la conversación.

Este encuentro con la vicepresidenta se produce en un momento clave en el que ambos gobiernos intentan aproximar posturas para la retirada de varios recursos del Ejecutivo central contra cuatro leyes vascas: la Ley Municipal, la de Adicciones, la de víctimas policiales y la de Iniciativa Legislativa Popular.

También ambos ejecutivos han comenzado a negociar cuestiones relacionadas con las diferencias en torno al Cupo vasco y el retraso de las obras del Tren de Alta Velocidad.

Durante una breve intervención, Sáenz de Santamaría ha señalado que los españoles y los vascos, en las últimas elecciones, han marcado a los gobiernos el diálogo como método de trabajo y el acuerdo como “marco definidor de la política”.

“Creo que eso debemos ejercerlo en todos los foros y no olvidar ninguno de ellos. Cada uno con su propia voz, sin adhesiones ni imposiciones pero contribuyendo con franqueza a un debate público que nos reclaman los ciudadanos”, ha incidido.

Ha señalado que De Andrés, por su experiencia política y pública (ha sido diputado general de Álava, parlamentario y presidente del PP alavés) sabrá marcar a la Delegación del Gobierno su capacidad de diálogo, entendimiento, conocimiento foral y un profundo arraigo a su tierra y a los valores comunes que constituyen España.

“Los gobiernos de España, vasco, diputaciones forales y entes locales somos Estado y estamos llamados a ejercer una corresponsabilidad desde la cooperación y lealtad”, ha subrayado.

“Estamos llamados a ver en el otro no el origen de los problemas sino un interlocutor necesario e imprescindible para encontrar soluciones”, ha enfatizado.

Por su parte, Javier de Andrés, que ha jurado su cargo en castellano y en euskera, ha señalado que su antecesor ha asumido con “entereza” su actuación para garantizar el cumplimiento de la Constitución. “Nadie que actúe con lealtad a los acuerdos de las cámaras legislativas puede ver como un problema la demanda de su cumplimiento”, ha señalado.

El nuevo delegado ha mencionado a las víctimas del terrorismo, a las que ha prometido defender frente “a cualquier menosprecio o humillación, particularmente de los que pudieran proceder de las administraciones locales”.

Ha considerado que las víctimas requieren de una especial protección porque han padecido crímenes que han sido “amparados y jaleados por una parte de la población” y ha subrayado el papel de las Fuerzas de Seguridad en Euskadi tras décadas de defensa frente a la violencia terrorista de ETA, una experiencia que se convierte ahora en una oportunidad “para prevenir y combatir el terrorismo internacional”.