Los rectores y la comunidad científica alertan de la separación de Ciencia y Universidades en dos ministerios

Los rectores y la comunidad científica no parecen muy contentos con la separación de los ministerios de Ciencia y Universidades que va a realizar Pedro Sánchez por “las consecuencias que acarreará tal decisión”, según aseguran en un comunicado publicado esta mañana y que respaldan la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), la Confederación de Sociedades Científicas de España (COSCE), la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME) y la Alianza de Centros Severo Ochoa y Unidades María de Maeztu (SOMMa).

“Cualquier partición del Ministerio actual será una mala noticia para nuestro país porque implicará alejar el conocimiento de la centralidad política que se está imponiendo en Europa. Es imprescindible que la gestión del llamado ”triángulo del conocimiento (investigación-innovación-educación) quede reforzada en el nuevo Gobierno en un único ministerio“, explica nota.

El Gobierno ha anunciado que en esta legislatura separará el actual Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades que ha dirigido Pedro Duque en dos carteras: una, que mantendrá el propio Duque, para Ciencia e Innovación (a falta de conocer su denominación y competencias exactas). Otra, una de las que gestionará Unidas Podemos a través del sociólogo Manuel Castells, para Universidades (que tampoco tiene sus funciones exactas atribuidas).

La principal tarea de Duque será dar un empujón al sistema científico español a través de una subida de la inversión, tanto pública como privada, que se traduzca en una mayor producción y en el aumento de la plantilla investigadora y mejora de sus condiciones laborales. España invierte en I+D+i el 1% de su PIB, la mitad que la media europea.

Castells tendrá como misión fundamental sacar adelante una nueva ley universitaria que, entre otras cuestiones, debe actualizar la educación terciaria para adaptarla más al espacio superior europeo de educación cuando se cumple una década de su llegada a los campus. Como su homólogo de Ciencia y conjuntamente con él, también tendrá que mejorar las condiciones laborales del personal universitario, subsumido en la precariedad como consecuencia de la crisis.

“Debe gestionar el sistema de ciencia en su globalidad”

“Este Ministerio [único], de la mano de su titular, debe tener el mayor peso político posible, y reunir todas las competencias y recursos necesarios para gestionar el sistema de ciencia en su globalidad, incluida la investigación que se realiza en las universidades”, argumenta la CRUE, “lo cual es condición necesaria para que sus propuestas tengan la atención y viabilidad que la ciencia requiere, teniendo en cuenta que las políticas científicas son competencia de todo el Consejo de Ministros, a iniciativa del ministro de turno”.

La comunidad científica califica de “maltrecha” la ciencia en España y asegura que solo podrá recuperar “su línea ascendente si puede articular e impulsar la inmensa mayoría del conocimiento que este país ha demostrado ser capaz de generar”.

Rectores e investigadores creen que fragmentar los Ministerios supondrá fragmentar los recursos. “A este respecto hay voces autorizadas en Europa que alertan del error que puede suponer enfrentar investigación y universidades a la hora de la negociación presupuestaria, lo que podría suponer décadas de estancamiento para la investigación, las universidades, o ambas”, aseguran la Crue y las asociaciones investigadoras.