Brasil, uno de los epicentros mundiales de la pandemia, ha vuelto a superar este martes las 1.000 muertes diarias a causa de la COVID-19, por lo que el total de decesos asciende a 226.309, en momentos en los que aumenta la preocupación mundial por la nueva cepa amazónica, ha informado el Gobierno.
Según el boletín divulgado por el Ministerio de Salud, el país ha registrado en las últimas 24 horas un total de 1.210 nuevas muertes y 54.096 contagios, tras los 595 decesos y los 24.591 infectados contabilizados el lunes. Las cifras suelen ser inferiores los fines de semana y los lunes, ya que muchos municipios de Brasil no consiguen computar los datos por falta de personal, pero vuelven a subir a partir del martes.
De acuerdo con los datos compilados en los últimos 14 días, Brasil tiene un promedio de 37.600 casos y 1.000 muertes diarias por coronavirus, una enfermedad que acelera con fuerza en plena la segunda ola del virus en el país.
Los registros ratifican a Brasil como el principal epicentro de la pandemia en Latinoamérica y lo mantienen como el segundo país del mundo con mayor número de muertes, después de Estados Unidos, y el tercero con más contagios, detrás del país norteamericano e India.
Informa EFE.