Los Reyes inauguran en A Coruña la primera exposición del Picasso gallego

Los Reyes han inaugurado hoy en el Museo de Bellas Artes de A Coruña la exposición “El primer Picasso”, la mayor muestra realizada en la historia de la etapa coruñesa del artista que marcará un hito en el conocimiento de la vida del pintor malagueño durante su infancia en Galicia.

Don Felipe y doña Letizia, acompañados por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; la ministra de Fomento, Ana Pastor, y el alcalde de la ciudad, Carlos Negreira, han sido recibidos a su llegada al museo por su directora, Ángeles Penas, entre otras personalidades.

La muestra, organizada por el Ayuntamiento, presenta a través de 207 obras, de las que 81 son de Picasso, un recorrido por los años fundamentales en la formación del genio andaluz, que transcurren desde su llegada a A Coruña en octubre de 1891 hasta su marcha en abril de 1895.

En esos años, Picasso estudió en el colegio Eusebio da Guarda y en la Escuela de Bellas Artes de la ciudad, donde empezó a despuntar como artista dominando la técnica del lápiz, el carbón, la tinta o el óleo con obras -algunas inéditas- como “La muchacha de los pies descalzos”, la más importante que compuso en la ciudad, y “El hombre de la gorra”.

Como acostumbra recordar el alcalde, “a A Coruña llega un niño en 1891, pero de aquí se marcha un artista en 1895”, pues fue en ella donde recibió formación académica por primera vez, trabajó con su primer mecenas (Ramón Pérez Costales), conoció el amor, sufrió su primer contacto con la muerte, la de su hermana Conchita, y realizó su primera exposición.

A Coruña no fue solo la ciudad donde “empezó todo” para él en su trayectoria profesional, sino que también fue ella la que “catapultó su genialidad” hasta convertirse en el pintor que revolucionaría el panorama artístico del siglo XX.

La comisaria de la muestra, Malén Gual, y la directora del Museo de Bellas Artes de A Coruña coinciden en destacar que el periodo coruñés de Picasso ha sido “solapado y ensombrecido por su Málaga natal y la Barcelona vanguardista”, e incluso “poco valorado” hasta esta exposición, organizada durante un año y medio por expertos y un comité científico que investigó esta etapa.

“Estos estudios no son algo baladí, caprichoso, sino que realmente existe toda una base documental, toda una base artística o de inicio de un concepto artístico desde que Picasso vivió aquí, que le influye para, en el futuro, sentir que es lo que le llena para enfocar su vida”, sostiene la académica Ángeles Penas.

Declarada acontecimiento de excepcional interés público, “El primer Picasso. A Coruña 2015” conmemora el 120 aniversario de la primera exposición del pintor, celebrada en la calle Real coruñesa.

En esta calle ocurre algo “importante que solo pasa en A Coruña”, explica Malén Gual, y es que a finales del siglo XIX era costumbre que en los escaparates de las tiendas se mostraran las obras de artistas, por lo que Picasso se habituó a ver arte paseando.

En total, la exposición consta de 207 piezas, 81 de Picasso, entre ellas 33 óleos y 42 dibujos, 59 de las cuales las pintó en A Coruña, y las demás pertenecen a otros autores con la finalidad de contextualizar al pintor malagueño y ver cómo se nutre de los mismos temas que otros artistas y que sus maestros, como Isidoro Brocos y Román Navarro, hasta llegar a superarlos.

Cedidas por la familia o los museos de París, Barcelona o Málaga, la muestra expone “Playa del Orzán”, “Torre de Hércules”, “Perfil de mujer gallega”, “Aldeanos gallegos” o “Pareja de ancianos”, “Cabeza de muchacho (autorretrato evocativo)”, “Fauno sonriendo”, “Paloma y su muñeca, fondo blanco” y “El juego del toro”, “Retrato de un hombre barbudo” o “Estudio doble del ojo izquierdo”.